Activista saudí demanda a tres exfuncionarios estadounidenses y a una empresa de los EAU
La Electronic Frontier Foundation anuncia que ha presentado una demanda contra tres ex funcionarios estadounidenses que, según Loujain al-Hathloul, ayudaron a piratear su teléfono móvil, lo que la llevó a la cárcel y a la tortura.
La activista saudí Loujain al-Hathloul anunció que demandará a tres exfuncionarios estadounidenses que trabajaron en los servicios de inteligencia y en el ejército de Estados Unidos, quienes hackearon su teléfono móvil para que un gobierno extranjero pudiera espiarla antes de que fuera encarcelada y torturada por las autoridades saudíes.
El jueves 11 de febrero, Al Hathloul quedó en libertad tras una detención que duró más de mil días.
Las autoridades saudíes mantuvieron a la activista por los derechos de las mujeres en régimen de aislamiento durante meses y la sometieron a múltiples formas de abuso que incluyen descargas eléctricas, flagelación y agresiones sexuales, según las organizaciones de derechos humanos.
Los miembros de la familia de Al-Hathloul han declarado en repetidas ocasiones que algunas de las sesiones de tortura tuvieron lugar en presencia de Saud al-Qahtani, un estrecho colaborador de Mohammed bin Salman, el príncipe heredero saudí.
La demanda
La Electronic Frontier Foundation anunció el jueves que había presentado una demanda ante el Tribunal Federal de Estados Unidos en nombre de al-Hathloul contra los exfuncionarios estadounidenses Mark Baer, Ryan Adams y Dania Gerek, además de una empresa de ciberseguridad contratada con los EAU llamada DarkMatter.
El hackeo condujo finalmente, según la demanda, a la detención de Hathloul en los EAU y a su entrega a Arabia Saudí, donde fue detenida, encarcelada y torturada.
Bayer, Adams y Gerek admitieron el pasado mes de septiembre haber proporcionado tecnología avanzada de piratería informática a los EAU, y estos acordaron con ellos el pago de aproximadamente 1,7 millones de dólares para resolver los cargos penales en un acuerdo de enjuiciamiento diferido, que el Ministerio de Justicia describió como el primero de este tipo.
El Ministerio de Justicia describió a cada uno de ellos como antiguo personal de inteligencia o militar. Según un informe anterior a la Agencia de Seguridad Pública, Bayer trabajó anteriormente para la NSA.
BIG NEWS: the fight to #FreeLoujain is not over.
— Lina Alhathloul لينا الهذلول (@LinaAlhathloul) December 9, 2021
Our sister Loujain, represented by @EFF sues spyware maker DarkMatter for violating US anti-hacking and international human rights laws.
All the best my dear, you’re the best ❤️🌻
Full complaint here : https://t.co/gY5GJcTs9Y
El trío forma parte de los funcionarios estadounidenses con experiencia en espionaje y piratería informática que trabajan para gobiernos extranjeros con historiales de derechos humanos cuestionables.
"Las empresas que venden sus programas y servicios de vigilancia a gobiernos opresores deben rendir cuentas por los abusos contra los derechos humanos resultantes", declaró el director de Libertades Civiles de la EFF, David Greene, en un comunicado.
"Ningún gobierno o individuo debe tolerar el uso indebido de software espía para impedir los derechos humanos o poner en peligro la voz de la conciencia humana", dijo al-Hathloul en una declaración como parte de su demanda, que fue compartida por la EFF.
Reuters informó anteriormente de que una campaña de hackeo de personas dirigida por DarkMatter -conocida como Proyecto Raven- tuvo como objetivo y hackeó a al-Hathloul, y le asignó el nombre en clave de "Purple Sword".
"El hackeo del iPhone de al-Hathloul por parte de DarkMatter formaba parte de la campaña de persecución de los Emiratos Árabes Unidos contra los disidentes percibidos por ellos mismos y por Arabia Saudí", afirma la demanda.