Conversaciones ruso-norteamericanas sobre seguridad fueron "complicadas y profesionales"
Según declaraciones de Serguéi Riabkov, Estados Unidos se tomó muy en serio las propuestas de seguridad de Moscú. Además, se ha programado un diálogo entre Rusia y la OTAN y conversaciones en el marco de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
De acuerdo con el reporte de la agencia de noticias TASS “Estados Unidos se tomó muy en serio las propuestas de seguridad de Moscú y las trabajó a fondo”, aseguró el viceministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, jefe del equipo negociador ruso en el diálogo.
Rusia adoptó una postura dura, pero no presentó ultimato, dijo el funcionario ruso a los periodistas al finalizar el encuentro bilateral en esa ciudad suiza.
Moscú reiteró que no tiene intenciones de atacar a Ucrania y subrayó que todas las medidas para el entrenamiento de combate de tropas se llevan a cabo dentro de su territorio nacional. “No hay motivos para temer cualquier escenario de escalada en ese sentido”, explicó.
Rusia insta a Estados Unidos a mostrar máxima responsabilidad, no se pueden subestimar los riesgos de un posible enfrentamiento, dijo en la conferencia de prensa el vicecanciller ruso.
Según Riabkov, "la conversación fue muy concreta" y "sustancial". "La parte estadounidense ha tomado nuestras propuestas muy en serio" y los diplomáticos rusos tuvieron la posibilidad de exponer la lógica y el contenido de esas, aseveró el vicecanciller.
Aunque las conversaciones "permiten ser optimista", durante el evento de hoy las partes no han tomado decisiones políticas. Estas serán adoptadas después de las conversaciones con la OTAN y durante el encuentro la OSCE, que tendrán lugar el miércoles y el jueves, respectivamente, señaló el vicecanciller ruso, afirmando que "las cuestiones principales están en suspenso".
Riabkov las resumió en tres aspectos principales "por qué es un imperativo absoluto obtener garantías legales de la no expansión de la OTAN, por qué que obtengamos garantías legales contra el despliegue cerca de las fronteras rusas de las fuerzas de ataque que podrían alcanzar objetivos en nuestro territorio, y la cuestión de que la OTAN abandone en gran medida el desarrollo material de los territorios de los Estados miembros de la OTAN".
También subrayó que el bloque militar debería de volver a las fronteras que tenía en 1997, antes de que iniciara cooptar países del antiguo bloque socialista.
"Hemos dejado claro que si no se avanza en estas tres áreas clave, indispensables, imprescindibles, necesarias para nosotros, el trabajo en otros aspectos, aunque importantes, quedará en entredicho", continuó Riabkov y advirtió de los peligros de un escenario donde "los países de la OTAN cometan un error y actúen en detrimento de la seguridad europea", señala Rt.
Además, confirmó que hay algunas cuestiones de las que "no se puede imaginar que Rusia o la otra parte cambien sus opiniones". "Pero creemos que es absolutamente necesario lograr que Ucrania nunca se haga miembro de la OTAN", resaltó Riabkov.
"Estamos hartos de habladurías […] necesitamos garantías impermeables, infalibles, legalmente vinculantes", añadió.
Al igual que en varias ocasiones ha dicho Vladimir Putin, los diplomáticos de su país volvieron a dejar claro que Moscú no tiene planes de iniciar un conflicto. Al contrario, Riabkov afirmó que las maniobras militares rusas son respuesta a actividades cada vez más intensas de los países miembros de la OTAN en Ucrania y algunos otros Estados vecinos de Rusia.
Mientras, la subsecretaria de Estado, Wendy Sherman, que presidió la delegación estadounidense, confirmó que las dos partes han llegado a "una serie de ideas en las que nuestros dos países podrían tomar medidas recíprocas que serían de nuestro interés de seguridad y mejorarían la estabilidad estratégica", recoge AFP.
"Sin embargo, somos firmes en rechazar las propuestas de seguridad que simplemente son algo inaceptable para Estados Unidos. No permitiremos que nadie termine la política de puertas abiertas de la OTAN", dijo Sherman.
En medio de las tensiones diplomáticas por el conflicto en la frontera con Ucrania, Rusia publicó en diciembre los proyectos de dos acuerdos que quiere alcanzar con EE.UU. y la OTAN sobre garantías de seguridad. Entre los planteamientos establecidos, Moscú solicita que la Alianza detenga su expansión hacia el este y que Ucrania no se adhiera a ella, un punto sobre el que las dos partes tienen opiniones opuestas.
En diciembre, hubo una reunión virtual y una conversación telefónica entre los presidentes de las dos potencias. Ambas fueron dedicadas a cuestiones de seguridad.
Durante el segundo encuentro, Joe Biden "declaró claramente" a Vladímir Putin que no desplegará armas ofensivas en Ucrania, comunicó el asesor del mandatario ruso, Yuri Ushakov. "También subrayó que Rusia y Estados Unidos pueden y deben desempeñar un papel clave en los esfuerzos por garantizar la paz y la seguridad tanto en Europa como en el resto del mundo", indicó.
Ushakov agregó que Putin dijo a Biden que Rusia actuará para garantizar su seguridad del mismo modo que actuaría EE.UU. y amenazó con "una ruptura completa de relaciones" en caso de "sanciones masivas" contra Rusia. Fue entonces cuando los presidentes acordaron las negociaciones en Ginebra y señalaron que controlarían personalmente el proceso.