Dos de cada cinco haitianos sufre de inseguridad alimentaria
Entre las principales causas de esta situación se encuentran el sismo ocurrido el verano de 2021, en el que 800 mil perdieron su hogar o su modo de vida.
Un 43 por ciento de la población de Haití estaría en condiciones de inseguridad alimentaria, de acuerdo a la ONG española Alianza por la Solidaridad-Action Aid, la cual recuerda que, de acuerdo a Naciones Unidas, se necesitan 253,6 millones de dólares para cubrir las necesidades de sus habitantes.
El dato de la ONG trascendió en ocasión de la conmemoración del intenso terremoto que el 12 de enero de 2010 destruyó el sur del país, en particular la capital, Puerto Príncipe y se cobró entre cien mil y 300 mil vidas, según datos de entonces.
Los daños dejados por aquel desastre, unido al paso de varios huracanes y un nuevo terremoto en agosto de 2021 han provocado, como una de sus consecuencias, que, según los datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la inmigración ilegal en 2021 aumentó drásticamente en el país caribeño.
Solo en octubre de ese año fueron repatriados 1 194 haitianos que intentaban llegar a Estados Unidos, muchos de ellos procedentes de las zonas rurales.
Alianza por la Solidaridad dice haber facilitado ayuda humanitaria en 2021 a 34 mil familias haitianas, lo cual se traduce en unas 170 mil personas, contando con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo- Aecid, de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria de la Unión Europea, y del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
Esta ayuda incluye, entre otras cosas, kits de alimentos, dinero en efectivo para reconstruir casas o facilitar el acceso a la llamada cesta básica alimentaria y apoyo psicosocial.
Entre las principales causas del agravamiento de esta situación se encuentran el sismo ocurrido el verano del pasado año, en el que murieron dos mil personas, 12 mil resultaron heridas y 800 mil perdieron su hogar o su modo de vida.
También influyó la inestable situación política, que se profundizó tras el asesinato del presidente de la República, Jovenel Moïse, en julio pasado. No obstante, la mala situación del país se ve recrudecida también por otro obstáculo, la violencia social.
“Haití se ha convertido en un país por el que circulan armas y drogas con total descontrol. Hay carestía y miedo y el resultado es que un 43 por ciento de la población sufre inseguridad alimentaria sin que haya habido cosechas excesivamente malas o sequías, como otros años”, expresó mediante un comunicado la coordinadora de Alianza en Haití, Mercedes López.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) había solicitado en septiembre pasado, de manera urgente, más inversiones para ayudar a la población rural del país a restablecer la horticultura doméstica esencial y la agricultura en pequeña escala y evitar un empeoramiento de la crisis alimentaria, la cual afectaba unas 980 mil personas que resultaron más afectados por el terremoto de agosto de 2021 y se encontraban en una situación de inseguridad alimentaria aguda.