Aumento de tensiones geopolíticas y de demanda disparan el panorama del precio del petróleo
Un sondeo a 43 economistas y analistas estimó que el crudo Brent alcanzaría una media de US$ 79.16 por barril este año, la proyección más alta para el 2022 hasta ahora y un notable aumento respecto al consenso de US$ 73.57 de diciembre.
Los precios del petróleo extenderán su fuerte comienzo de año debido a los riesgos geopolíticos para la oferta sumados a un fuerte repunte de la demanda a medida que se desvanecen los temores sobre el impacto de la variante ómicron del coronavirus, mostró un sondeo de Reuters.
Un sondeo a 43 economistas y analistas estimó que el crudo Brent alcanzaría una media de 79,16 délares por barril este año, la proyección más alta para el 2022 hasta ahora y un notable aumento respecto al consenso de 73,57 dólares de diciembre.
El crudo estadounidense, por su parte, promediará 76,23 dólares en el 2022, frente a los 71,38 dólares previstos el mes pasado.
“Dado lo ajustado de los mercados, el petróleo puede subir por encima de los cien dólares, especialmente si el aumento de la oferta de la OPEP+ sigue sin alcanzar su objetivo, si los productores estadounidenses no responden o si la crisis entre Ucrania y Rusia se agrava”, dijo Economist Intelligence Unit.
Se considera que la demanda crecerá entre tres millones y cinco millones de barriles por día en el 2022, y los analistas estiman que el actual aumento de casos de la COVID-19 tendrá un impacto menor.
Los futuros del crudo Brent superaron los 90 dólares por barril por primera vez desde el 2014 la semana pasada debido a las preocupaciones sobre el probable impacto en la oferta derivado del enfrentamiento entre Occidente y Rusia, uno de los principales productores de petróleo del mundo, por Ucrania.
Las amenazas a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) por parte del movimiento hutí de Yemen también exacerbaron las preocupaciones sobre el suministro.
El petróleo podría subir aún más e auerdo a como se desarrolle el conlflicto entre Ucrania y Rusia y las sanciones occidentales podrían afectar las exportaciones de energía, señaló Marshall Steeves, analista de IHS Markit.
Goldman Sachs y Morgan Stanley pronosticaron recientemente precios del petróleo por encima de los cien dólares este año, citando un impacto de la COVID-19 más bajo de lo esperado y las interrupciones en el suministro.
Pero el analista Norbert Rücker de Julius Baer dijo que si bien el nerviosismo actual del mercado podría causar picos de precios a corto plazo, “los suministros en gran medida están artificialmente ajustado, no estructuralmente”.
La mayoría de los analistas coincidieron en que es probable que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, grupo conocido como OPEP+, continúen con su plan de aumentar la producción mensual en 400 mil barriles por día a pesar de que algunos miembros enfrentan limitaciones de capacidad.
En tanto, las liberaciones planificadas de las Reservas Estratégicas de Petróleo por Estados Unidos pueden tener solo un impacto mínimo en el mercado, agregaron.