Científica hondureña nominada a Premio Nobel
La nominación para el alto galardón, extensivo también a su colega Peter Hoter, resulta de una carta enviada al Comité Noruego del Nobel por la congresista estadounidense Lizzie Fletcher,
Diversas personalidades, instituciones y organizaciones en Honduras reconocen hoy la nominación de la científica María Elena Bottazzi al Premio Nobel de la Paz, por su aporte a la humanidad con la creación de la vacuna antiCOVID-19, Corbevax.
«¡Cuánto orgullo! (…). Una hondureña de corazón que ha dedicado su vida al servicio a través de la ciencia. ¡No hay dudas que este es nuestro momento, el momento de la mujer hondureña!», expresó la presidenta Xiomara Castro, desde su perfil en la red social Twitter.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), institución donde Bottazzi estudió Microbiología, manifestó también el reconocimiento a su extraordinaria labor en salud y contribución a la humanidad antes y durante la pandemia con la elaboración de un inmunógeno, libre de patentes y a bajo coste.
La nominación para el alto galardón, extensivo también a su colega Peter Hoter, resulta de una carta enviada al Comité Noruego del Nobel por la congresista estadounidense Lizzie Fletcher, la cual muestra los aportes de los científicos frente a los numerosos desafíos de la enfermedad.
"(…) el esfuerzo por desarrollar y distribuir una vacuna de bajo costo para todas las personas, sin limitación de patentes representa el trabajo por la fraternidad entre naciones y ciudadanos que el Premio Nobel, promueve y celebra", señaló la legisladora norteamericana en su solicitud.
Tras conocer la noticia, Bottazzi publicó un vídeo en sus plataformas digitales en el cual agradeció los mensajes de felicitación de colegas, familiares, amigos, medios de comunicación e instituciones y, a su juicio, la designación simboliza, en gran parte, sus raíces hondureñas.
De acuerdo con la licenciada en Microbiología, la vacuna Corbevax, lanzada por el Hospital Infantil de Texas y el Colegio Baylor de Medicina en Estados Unidos, constituye un alivio para los territorios pobres, víctimas de la crisis epidemiológica, y ya comenzó su producción a gran escala en la India.