Falla la diplomacia en su intento de rebajar la tensión entre Ucrania y Rusia
El Kremlin denunció la "histeria" de Washington a la vez que el presidente estadounidense, Joe Biden, amenazó a su par ruso con "repercusiones severas y rápidas" si ataca al país vecino.
Los esfuerzos diplomáticos entre Occidente y Rusia sobre la crisis en Ucrania no han funcionado. El sábado el Kremlin denunció la "histeria" de Washington a la vez que el presidente estadounidense, Joe Biden, amenazó a su par ruso con con "repercusiones severas y rápidas" si ataca al país vecino.
Washington insistió el viernes pasado en el riesgo de una invasión "inminente" de Ucrania por parte de Rusia, que ha concentrado más de cien mil soldados cerca de la frontera y acaba de iniciar maniobras militares en el Mar Negro y Bielorrusia, acorralando de facto al país.
Una invasión de este tipo tendría consecuencias "rápidas y graves" para Rusia, advirtió Biden el sábado en una reunión con su homólogo ruso.
"La histeria ha alcanzado un punto álgido", dijo el asesor diplomático de Vladimir Putin, Yuri Ushakov, añadiendo que los dos presidentes habían acordado "continuar los contactos a todos los niveles".
Desde los primeros movimientos de tropas cerca de Ucrania en noviembre, Moscú ha negado que tenga intención de invadir el país vecino, pero ha pedido el fin de la expansión de la OTAN y del apoyo occidental a la ex república soviética, que considera parte de su esfera de influencia.
En una reunión con el presidente francés, Emmanuel Macron, Putin criticó las "entregas a gran escala de armamento moderno" a Kiev, diciendo que estaban creando "condiciones previas para posibles acciones agresivas de las fuerzas ucranianas" en el este del país, donde el Kremlin ha estado apoyando a los separatistas prorrusos durante ocho años.
La lista de países que piden a sus ciudadanos que abandonen Ucrania va en aumento, entre ellos Estados Unidos, Alemania, Italia, Reino Unido, Países Bajos, Canadá, Noruega, Australia, Japón e "Israel".
La compañía aérea KLM anunció el sábado que suspendía los vuelos a Ucrania por tiempo ilimitado.
Moscú también sacó del país a parte de su personal diplomático y argumentó de que temía "provocaciones". Canadá anunció el sábado que cerraba temporalmente su embajada en Kiev y la trasladaba temporalmente a Leópolis, en el oeste de Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, volvió a tachar de demasiado alarmistas las advertencias estadounidenses. "Toda esta información (sobre un posible ataque) solo causa pánico y no nos ayuda", dijo.
Esta crisis es la más grave en Europa desde el final de la Guerra Fría, según los occidentales. El canciller alemán, Olaf Scholz, viaja a Kiev el lunes y a Moscú el martes.