Programa Mundial de Alimentos: la crisis financiera empuja a millones de yemeníes a la hambruna
La situación humanitaria en Yemen sigue siendo difícil debido al continuo bloqueo de los puertos por parte de las fuerzas de la coalición saudí.
El Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas dijo, el viernes, que se ve "obligado a reducir las raciones de ayuda alimentaria para millones de personas en Yemen devastado por la guerra para alimentar a quienes corren el riesgo de caer en condiciones similares a las de la hambruna".
“Los fondos de los donantes se están agotando a pesar de que Yemen está pasando por lo que Naciones Unidas describe como la peor crisis humanitaria del mundo”, dijo Corinne Fleischer, directora del Programa Mundial de Alimentos para Medio Oriente y África del Norte, en una entrevista con la agencia de prensa France-Presse".
Fleischer explicó que la financiación proporcionada por los donantes hasta ahora cubre solo el 18 por ciento de los casi 2 mil millones de dólares que el programa necesita para seguir con sus actividades en Yemen.
“Necesitamos otros 806 millones de dólares en los próximos seis meses para alimentar a 13 millones de personas”, agregó la funcionaria.
Esta escasez, según ella, no deja otra opción a la ONU que destinar fondos a cinco millones de personas en Yemen "al borde de la inanición", lo que significa que los otros ocho millones que sufren falta de alimentos recibirán la mitad de los raciones del PMA.
"Una pareja nos dijo que no habían comido durante dos días para dar de comer a sus hijos. Muchos ahora dicen que tendrán que volver a comer solo pan y té. Claramente, esto no es suficiente para una dieta saludable", continuó Fleischer.
La funcionaria del programa agregó que "lo más desgarrador que escuchamos fue que la gente comenzó a recolectar hojas de árboles" para comer, y destacó que "PMA logró evitar la hambruna el año pasado gracias a la generosidad de los donantes al proporcionar 1400 millones de dólares".
Pero los fondos donados han caído drásticamente este año, lo que Fleischer atribuyó al aumento "significativo" de las necesidades globales, influenciadas por los conflictos, el cambio climático y el coronavirus.
"El número de personas que necesitan desesperadamente ayuda alimentaria ha aumentado de 115 millones a 280 millones. Por supuesto, las necesidades van en aumento", dijo.
Además, que "los donantes han sido generosos, pero también tienen que lidiar con sus propios problemas asociados generandos por Covid-19 y sus problemas economías. Por lo tanto, simplemente no hay mucho dinero disponible".
La situación humanitaria en Yemen sigue siendo difícil debido al continuo bloqueo de los puertos por parte de las fuerzas de la coalición saudí, lo que reduce la disponibilidad de combustible, alimentos y medicinas, y provoca un aumento del número de ciudadanos que necesitan ayuda.