El sistema Swift se utilizó como arma de guerra
Tras la operación militar en Ucrania, Rusia fue expulsada del sistema financiero que reúne alrededor del 70% de las transacciones bancarias mundiales.
Rusia ha sido excluida del sistema SWIFT como forma de represalia por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, tras la operación militar rusa en territorio ucraniano. La Sociedad para las Telecomunicaciones Financieras Mundiales (Swift) concentra cerca del 70 por ciento de las transacciones bancarias mundiales y ha sido utilizada en otras ocasiones para sancionar a países en situación de guerra.
Creado en Bruselas en 1973, el sistema conecta 11 mil bancos e instituciones financieras en más de 200 países. En la práctica, es una plataforma que permite a los bancos informar de las transferencias en tiempo real. Por término medio, se envían 42 millones de mensajes diarios. Sin embargo, la desconexión de Rusia no es inmediata, sino que representa una serie de dificultades para que el país importe y exporte sus productos.
La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que "el mundo está más decidido que nunca a aislar económicamente a Rusia". Los países también decidieron restringir la capacidad del Banco Central para vincular el tipo de cambio del rublo, la moneda rusa, a las transacciones financieras internacionales.
Decisiones anteriores
Considerada por algunos analistas como un "arma nuclear financiera", no era la primera vez que Swift se utilizaba como arma de guerra. En 2012, Estados Unidos y la Unión Europea también decidieron penalizar a Irán excluyendo a todos los bancos iraníes del sistema. La decisión hizo que las exportaciones del país persa cayeran un 30 por ciento.
Aunque Cuba y Venezuela no fueron excluidas del Swift, gran parte de las sanciones que conforman el bloqueo económico contra ambos países dificultan las transacciones comerciales en el sistema financiero, obligando a los gobiernos a triangular las compras vinculadas al Estado.
En 2014, cuando Crimea decidió, en referéndum popular, anexionarse a Rusia, la Casa Blanca ya amenazó con excluir a los bancos rusos del sistema, pero acabó optando por otras sanciones económicas, que aceleraron el proceso de desdolarización de las reservas rusas. Ese mismo año, Moscú comenzó a desarrollar el Sistema de Transferencia de Mensajes Financieros (SPFS), una versión rusa que podría sustituir a Swift.
PESA: el sistema ruso de transferencias financieras
Según el gobierno ruso, el PESA tiene 23 bancos extranjeros asociados de países como Bielorrusia, Alemania, Suiza y Kazajistán.
En julio de 2021, Rusia ya había eliminado la moneda estadounidense del Fondo Nacional de Inversiones (FNI). Hasta esa fecha, cerca del 35 por ciento de las reservas internacionales del país estaban almacenadas en dólares. Con el cambio, el Ministerio de Finanzas ruso ha dado prioridad al euro, que representa el 39 por ciento de las reservas, y al yuan chino, con el 30,4 por ciento.
Las reservas internacionales rusas son de 630 mil millones de dólares. La presidenta del Banco Central de Rusia, Elvira Nabiullina, aseguró que a pesar de la exclusión de SWIFT, todos los fondos de los bancos rusos están asegurados.
Tras sufrir una variación del diez por ciento en el valor de la moneda nacional, el rublo, el Banco Central ruso también decidió elevar el tipo de interés básico al 20 por ciento.
Otros sistemas en el mundo
Además de Rusia, en 2015, India puso en marcha el Sistema de Mensajería Financiera Estructural (SFMS). Por su parte, China creó el Sistema de Pagos Interbancarios Transfronterizos (CIPS), que procesa más de 20 mil millones de dólares al día y está creciendo rápidamente.
En América Latina, la propuesta de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba-TCP) era crear el Sistema Único de Compensación de Pagos Regionales (Sucre), que interconectaría las economías regionales. Sin embargo, la propuesta no se puso en marcha.