Seguridad energética está en peligro por atentados, dice jefe de petróleo saudí
El ministro de Energía, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo que los ataques transfronterizos han puesto en duda la capacidad de suministrar al mundo los requerimientos energéticos necesarios.
El jefe de petróleo de Arabia Saudita dijo que los mercados están pasando por un "período de nerviosismo" y reiteró este martes que la capacidad del reino para garantizar la seguridad energética ya no está garantizada.
El ministro de Energía, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo que los ataques transfronterizos han puesto en duda "nuestra capacidad de suministrar al mundo los requerimientos energéticos necesarios."
"No hace falta decir que si este suministro de seguridad se ve afectado, nos impactará a nosotros... pero creo que también afectará a la economía mundial", dijo.
El príncipe Abdulaziz dijo que Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos podían contar con un esfuerzo colectivo para garantizar su seguridad energética. "Estos pilares ya no existen", añadió. El príncipe habló en la Cumbre del Gobierno Mundial, un evento patrocinado por el gobierno de Dubai en los EAU.
Los precios del petróleo, que ya están en su nivel más alto en años, se han disparado aún más en medio de los ataques de los hutíes contra Arabia Saudí, el mayor productor de petróleo de la OPEP. Los precios del crudo Brent cotizan por encima de los 110 dólares el barril, aunque se han disparado por momentos superando los 120 dólares.
Los Houthis han utilizado drones y misiles para atacar las instalaciones petroleras del reino, y también han atacado objetivos en la capital de los EAU, Abu Dhabi.
El viernes, atacaron una instalación saudí de almacenamiento de productos petrolíferos en la ciudad costera de Jeddah, en el Mar Rojo.
La guerra en Yemen -donde una coalición militar liderada por Arabia Saudí, de la que forman parte los Emiratos Árabes Unidos, lucha contra los houthis desde 2015- ha sacudido a estos dos estados árabes del Golfo, poniendo de manifiesto la vulnerabilidad de sus instalaciones petrolíferas.
Arabia Saudí ha expresado su frustración en declaraciones oficiales, afirmando que no asumirá ninguna responsabilidad por la escasez de suministros de petróleo debida a los ataques.
Los precios del crudo también se han visto favorecidos por el acuerdo alcanzado por los principales productores, encabezados por Arabia Saudí y Rusia, en una alianza conocida como OPEP+, que limitó la producción de petróleo para evitar que los precios se desplomaran en caso de bloqueo por pandemia en 2020.
El grupo se ha ceñido a su cauteloso plan de liberar más barriles mensualmente a medida que las restricciones de la COVID-19 se han suavizado. Los críticos del plan dicen que la guerra rusa en Ucrania está agitando los mercados y disparando los precios de la energía para los consumidores en los surtidores.
Los altos precios de la energía no sólo han beneficiado a los exportadores de petróleo, sino que también han ayudado a Rusia a compensar parte del dolor económico de las sanciones occidentales por su invasión de Ucrania.
Estados Unidos, los países europeos y Japón han pedido a los productores árabes del Golfo con capacidad sobrante que bombeen más petróleo o, como mínimo, han sugerido que lo hagan. El primer ministro británico, Boris Johnson, hizo esa petición en persona en Riad y Abu Dhabi este mes.