A principios de enero pasado, los prisioneros administrativos palestinos tomaron una posición colectiva, declarando un boicot completo y definitivo de todos los procedimientos judiciales relacionados con la detención administrativa.

Este tipo de detención es sin cargos ni juicio y sin permitir que el detenido o su abogado inspeccionen los materiales de prueba, en clara y explícita violación de las disposiciones del derecho internacional humanitario, por lo que "Israel" es la  única parte en el mundo que practica esta política

Las autoridades de ocupación y las administraciones penitenciarias alegan  que los detenidos  tienen archivos secretos que nunca pueden ser revelados, por lo que el recluso no conoce la duración de su condena ni los cargos que se le imputan.

El detenido administrativo a menudo está sujeto a la renovación del período de detención más de una vez por un período de tres meses, seis meses u ocho, y en ocasiones puede llegar a un año completo, y en algunos casos ha llegado a siete años, como en el caso del luchador Ali Al-Jamal.

Cabe señalar que el número de reclusos en las prisiones de ocupación ha llegado a más de 4.500 reclusos, incluidas 31  mujeres y casi 180 niños.