Bolivia exige la soberanía sobre aguas del río Silala
El curso de las aguas del Silala, que tienen su origen en Bolivia, se encuentra en disputa desde 2016 por petición de Chile a que sea reconocido como un recurso de curso internacional.
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Bolivia exige la soberanía sobre aguas del río Silala.
Roberto Calzadilla Sarmiento, agente de Bolivia y embajador de este país en Países Bajos, solicitó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que se reconozca la soberanía del país suramericano sobre las aguas del Silala.
La petición se hizo durante la segunda ronda de alegatos, correspondiente a la última etapa del proceso judicial presidido por La Haya desde el 1 de abril para decidir “el estatus y uso de las aguas” de este recurso fluvial.
Bolivia solicitó respetuosamente a la Corte tener “soberanía sobre los canales artificiales y mecanismos de drenaje en el Silala que se encuentran en su territorio” y el derecho “a decidir si los mantiene y cómo”, expuso Calzadilla.
El pasado lunes Chile presentó sus argumentos solicitando que el tribunal declare estas aguas como un recurso internacional regido por el derecho internacional consuetudinario, y sobre el que tiene derecho al uso equitativo y razonable de sus aguas.
Estuvieron a cargo de la defensa los abogados Klein Kranenberg, Samuel Wordsworth, Laurence Boisson, y su agente Ximena Fuentes.
En respuesta a estos fundamentos, Calzadilla defendió en la jornada de hoy el derecho de su país a decidir sobre “el caudal artificial de las aguas del Silala que se organiza, mejora o produce en su territorio” y que su contraparte no debe adquirir ningún derecho sobre su caudal artificial.
Solicitó que las peticiones que pueda hacer la nación chilena a Bolivia, “para la entrega del caudal mejorado del Silala, así como las condiciones y modalidades de la misma, incluyendo la compensación a pagar por dicha entrega”, deben adherirse a un acuerdo establecido entre ambos países.
A su vez, requirió el reconocimiento de las aguas en cuestión como un recurso de curso internacional “que ha sido aumentado artificialmente”.
Añadió que el uso de las aguas del Silala por parte de Antofagasta debe ser equitativo y razonable, sin perjuicio del derecho de Bolivia, y que ambas naciones deben comprometerse a tomar las medidas pertinentes para evitar daños transfronterizos en el cauce del recurso en pugna.
La disputa legal pretende darle una conclusión a la demanda presentada por Chile en 2016 en pos de que las aguas del Silala fueran declaradas como un recurso de curso internacional.
Bolivia, que posee el origen de los manatiales de este recurso presentó una contrademanda dos años después donde pide el reconocimeinto de su soberanía sobre este afluente.
