Rusia califica como “grave error” su suspensión como observador de la OEA
Las naciones latinoamericanas están bajo una presión sin precedentes de EE.UU. y sus satélites, afirmó el embajador ruso en Washington
El embajador ruso en Estados Unidos, Anatoli Antónov, consideró un “grave error” la suspensión de su país como observador permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) debido al conflicto con Ucrania.
El diplomático denunció que, durante una reunión extraordinaria del Consejo Permanente de esa organización para discutir el tema, se le negó la oportunidad de intervenir, ni antes ni después de la votación del documento.
La tarea de toda organización internacional es unir a los Estados para solucionar problemas acuciantes que hoy existen de sobra en la región, dijo y se refirió, por ejemplo, a la recuperación económica post covid-19, la lucha contra la pobreza y la corrección de la desigualdad social.
Con esta decisión, dijo, casi todos los países de la Organización perdieron. “Entendemos que nuestros socios latinoamericanos están bajo una presión sin precedentes de Estados Unidos y sus satélites”, apuntó el diplomático.
“Observamos los intentos destructivos de sembrar la discordia en las filas de la organización, crear nuevas líneas divisorias en América Latina en el espíritu de la notoria doctrina Monroe”, expresó Antónov.
Subrayó que desde que comenzó a interactuar con la organización en 1992, hubo progresos en el trabajo conjunto en la lucha contra el terrorismo y las drogas.
“Surge la pregunta: ¿cómo la congelación de la participación de Rusia, que es miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, permitirá avanzar en la implementación de las tareas urgentes de la OEA? ¿Quién se beneficiará de la suspensión de nuestro estatus de observador en esta organización?”, agregó.
La resolución que aprobó la suspensión de Rusia fue apoyada por 25 miembros del Consejo Permanente de la OEA, mientras se abstuvieron Argentina, Brasil, Bolivia, México, El Salvador, Honduras, San Cristóbal y Nieves, además de San Vicente y Las Granadinas.