Hungría rechaza propuesta de la UE de prohibir importaciones de petróleo ruso
A pesar de la declaración de Ursula von der Leyen de prohibir el crudo en la UE en un plazo de seis meses, Hungría y Eslovaquia mostraron una severa oposición.
Tras proponer la prohibición de las importaciones de petróleo ruso a la UE para que Vladimir Putin pague un "alto precio por su bárbara agresión" en Ucrania, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se encontró con la inmediata oposición de Hungría.
Ursula von der Leyen sugirió que se prohíba el crudo ruso en un plazo de seis meses, y los productos refinados a finales de año, para frenar los planes de guerra de Putin.
Los Estados miembros están debatiendo en Bruselas un posible sexto paquete de sanciones, pero en un discurso pronunciado el miércoles, Von Der Leyen dijo que los flujos de petróleo ruso tienen que cesar, a pesar de las reservas de algunas capitales.
"Seamos claros: no será fácil", dijo Von der Leyen en el Parlamento Europeo. "Algunos Estados miembros dependen en gran medida del petróleo ruso. Pero simplemente tenemos que trabajar en ello. Ahora proponemos una prohibición del petróleo ruso. Será una prohibición total de las importaciones de todo el petróleo ruso, por mar y por oleoducto, crudo y refinado.
"Nos aseguraremos de eliminar el petróleo ruso de forma ordenada, de manera que nos permita a nosotros y a nuestros socios asegurar rutas de suministro alternativas y minimizar el impacto en los mercados globales", dijo
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, la ONG Europe Beyond Coal concluyó que la UE ha gastado unos 21 mil millones de euros (22 mil 300 millones de dólares) en petróleo ruso.
Las importaciones rusas representan el 25 por ciento de las importaciones de petróleo de la UE y son una importante fuente de dinero para el Kremlin, pero el grado de dependencia varía, y los ministros eslovaco y húngaro ya han declarado que buscarán la exclusión de las medidas.
¿No hay alternativa al petróleo ruso?
Un portavoz del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, dijo que en la propuesta no parecía haber "ningún plan ni garantías" para abandonar el petróleo ruso sin problemas.
Péter Szijjártó, el ministro de Asuntos Exteriores, declaró en Facebook: "En su forma actual, el paquete de sanciones de Bruselas no puede ser aceptado; no podemos votar responsablemente a favor". Hungría sólo podría aceptar estas sanciones si los envíos de oleoductos de crudo quedaran exentos de las limitaciones. La seguridad energética de Hungría podría entonces estar garantizada. Ahora no puede".
Eslovaquia había estado buscando un período de transición más largo para su alejamiento del petróleo ruso, pero sólo se le ha dado un año más para trabajar, lo que el gobierno de Bratislava argumenta que es insuficiente.
El paquete de sanciones requerirá el consentimiento unánime de los Estados miembros de la UE, cuyos representantes están estudiando los detalles en Bruselas con la esperanza de llegar a un acuerdo antes del fin de semana.
Según el borrador, la UE no solo restringiría las importaciones, sino que también impediría a cualquiera de sus individuos o empresas transportar petróleo ruso, asegurar su traslado o mantener equipos dedicados al tránsito del combustible fósil.