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Tras diez meses de trabajo, la Convención Constitucional de Chile presentó de forma oficial el primer borrador de la nueva Constitución que sustituirá la actual, heredada del fallecido dictador Augusto Pinochet.

Durante el acto, que se celebró en las históricas ruinas de Huanchaca, en la ciudad de Antofagasta, se hizo la entrega del documento de 499 artículos permanentes a la Comisión de Armonización para iniciar el proceso de corrección.

La presidenta del órgano constituyente, María Elisa Quinteros, precisó que el texto construido tiene "un marcado acento de autonomía para las regiones, tal como ha sido el anhelo de millones de chilenas y chilenos que no viven en el centro del país".

Quinteros detalló que ahora la Comisión de Armonización deberá "proponer un orden para dar coherencia necesaria a la propuesta constitucional". Además, comenzará su trabajo la Comisión de Normas Transitorias, que "discutirá nuevos artículos que tendrán como función dar gradualidad para que el cambio de la actual Constitución a la nueva Constitución tenga un avance balanceado", apuntó la funcionaria, añadiendo que la Comisión de Preámbulo, a su vez, redactará el texto introductorio de la nueva Carta Magna.

Se prevé que el documento definitivo se entregue al presidente Gabriel Bórich el próximo mes julio. El mandatario deberá convocar a un plebiscito, fijado para el 4 de septiembre, donde los chilenos votarán por la aprobación o el rechazo de la propuesta.

El proyecto es innovador desde su integración, ya que es la primera vez en el mundo que una Constitución es redactada por igual número de mujeres y varones, y con representación de las diversidades sexuales y los pueblos indígenas. La Convención ha debatido e incorporado temas que todavía no están plasmadas en ninguna otra Carta Magna y que abarcan derechos ambientales y de género y perspectivas innovadoras con respecto a los derechos de los animales y la naturaleza.