El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia anunció la retirada del país del Consejo de Estados del Mar Báltico (CBSS, por sus siglas en inglés), y destacó que la decisión no afectará a la presencia del país en la región.

"Los intentos de empujar a nuestro país del Báltico están condenados al fracaso. Continuaremos trabajando con socios responsables, realizando actividades de cuestiones clave de desarrollo de la región", indica la comunicación.

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De acuerdo con el Ministerio, la situación en el organismo "se está degradando". "Los países de la OTAN y de la Unión Europea dentro del CBSS renunciaron a un diálogo en pie de igualdad y a los principios sobre los que se creó esta estructura regional en el Báltico y la convierten consistentemente en una herramienta de política antirrusa", denunció.

Los países occidentales "han monopolizado el Consejo para sus propios fines coyunturales, hacen planes para configurar su trabajo en detrimento de los intereses rusos", señala la Cancillería en su comunicado. Por esos motivos, Rusia considera "contraproducente" su participación en el funcionamiento del organismo.

A principios de marzo, la Unión Europea, junto con los miembros del CBSS, suspendió a Rusia y Bielorrusia -como Estado observador- de las actividades de esta organización. "Esta decisión forma parte de la respuesta de la Unión Europea y sus aliados de ideas afines a la invasión de Rusia en Ucrania y la participación de Bielorrusia en la inmotivada e injustificada agresión", reza el comunicado.