Líbano rechaza amenazas de "Israel" y se adhiere al retorno de las negociaciones indirectas
Beirut presentará por primera vez una propuesta escrita a la delegación estadounidense sobre la demarcación de la frontera con "Israel", que cuenta con la aprobación del presidente.
El presidente del Líbano, Michel Aoun, afirmó que Beirut rechaza las amenazas de "Israel" y se mantiene firme en la vuelta a las negociaciones indirectas con la ocupación.
Aoun tuiteó este lunes que el Líbano rechaza las amenazas del enemigo israelí, que viola derecho internacional.
Añadió que no hay relación entre las conversaciones sobre la demarcación de la frontera con "Israel", la importación de gas y electricidad de Egipto y Jordania, o las negociaciones con el FMI.
Una fuente oficial libanesa dijo que Beirut presentará por primera vez una propuesta escrita a la delegación estadounidense sobre la demarcación de la frontera con "Israel", que cuenta con la aprobación del presidente, el primer ministro y el portavoz del Líbano.
La fuente dijo a Sputnik que el punto principal de la respuesta escrita del Líbano es que se basa en el derecho del país a invertir plenamente en el yacimiento de Qana, y su negativa a renunciar a nada de él.
El hecho de que el Líbano mantenga por primera vez una posición unida respecto a la demarcación es en sí mismo la mayor parte de la victoria, porque las diferencias sobre el asunto han amenazado con desperdiciar las posibilidades del Líbano.
El sábado, Aoun y el primer ministro libanés, Najib Mikati, discutieron la cuestión de la demarcación de las fronteras marítimas con la ocupación israelí para hacer avanzar las negociaciones.
Un buque operado por la empresa londinense Energen llegó para explotar un yacimiento de gas conocido como Karish, que según Líbano se encuentra en una zona disputada.
La zona disputada está en el epicentro de la cuestión, y llevó al secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, a instar a la ocupación israelí a sacar sus equipos del Mar Mediterráneo "rápida e inmediatamente", y advirtió de las repercusiones que tendría cualquier violación de la integridad territorial de Líbano.