Confiesan asesinos de periodista y líder indígena en Brasil
La tragedia ha causado conmoción en la sociedad brasileña e internacional.
Los dos hermanos detenidos por la desaparición del periodista inglés Dom Phillips y el indigenista Bruno Aráujo en la Amazonia brasileña, confesaron su crimen, según fuentes periodísticas de Brasil.
Amarildo y Oseney da Costa de Oliveira, reconocieron en interrogatorios separados que ultimaron a los dos profesionales, quienes permanecían en paradero desconocido desde el 5 de junio en la región amazónica del Valle de Javari.
De acuerdo con la fuente de la Policía Federal (PF), los hermanos mataron a Phillips y a Araújo a tiros, y luego quemaron y enterraron los cuerpos que aún no han sido encontrados.
La motivación del delito sigue siendo incierta, pero la policía investiga si existe relación con la actividad de pesca ilegal en la región.
Al citar círculos de la interpelación a los hermanos, la televisora GloboNews aseguró que ambos admitieron que perpetraron el crimen por temor a que Araújo los atrapara en labores pesqueras ilícitas.
Segunda tierra nativa más grande del país, el Valle de Javari es escenario, además de la captura piscícola ilegal, de conflictos típicos de la Amazonia como el tráfico de drogas, robo de madera y avance de la minería.
La PF inició búsquedas en el área para localizar los restos del colaborador del diario The Guardian y del estudioso de comunidades originarias.
Teniendo en cuenta la información de la fuente, de encontrarse los cadáveres se someterían a un examen de ADN, basado en material proporcionado por los familiares de las víctimas.
Sin importarle la conmoción que la tragedia causa en la sociedad brasileña e internacional y el dolor de los familiares, el presidente Jair Bolsonaro se atrevió a comentar que Phillips era mal visto en esa región, “porque hacía muchos reportajes contra los garimpeiros (mineros ilegales) y la cuestión ambiental”.
Según refirió Bolsonaro, los dos conocían del riesgo que enfrentarían en áreas totalmente agrestes y, por lo visto, no fueron cuidadosos.