Túnez se prepara para votar la nueva Constitución
La oposición está llamando a rechazar el referéndum que, según dicen, es un proceso ilegal.
Los tunecinos se preparan para acudir a las urnas el próximo lunes con el fin de refrendar el nuevo borrador de la Constitución, en medio de llamados de la oposición para boicotear la actividad legislativa.
El nuevo borrador de la Carta Magna otorga amplios poderes al presidente Qais Saeid, por lo que crecen los temores de una posible desviación en el poder.
El movimiento de Al-Nahda, uno de los más destacados opositores al presidente Said, llamó a boicotear el referéndum describiéndolo como un proceso ilegal, mientras que el Sindicato General de Trabajadores de Túnez, el más grande del país, afirmó no influir en la decisión de sus partidarios de participar o no en el referéndum.
El comité electoral del país registró a más de nueve millones de votantes que se prevé participen en el referéndum.
Mañana sábado finaliza la campaña de propaganda y el domingo será día de silencio electoral.
El presidente, Saeid presentó un borrador de la Constitución en su primera versión y luego le introdujo más de 40 enmiendas relacionadas con lo que se describió como errores filtrados, ya sea a nivel de edición de las cláusulas o para agregar nuevos conceptos.
Los expertos estiman que la tasa de participación en el referéndum será baja, teniendo en cuenta el trayecto controvertido durante la elaboración del nuevo borrador.
Túnez vive una aguda crisis política desde que el presidente Saeid decidió, hace un año, monopolizar el poder en el país, gobernando con decretos presidenciales que justifica con un peligro inminente, lo que fue considerado por parte de sus opositores como un golpe de estado contra la revolución y una excesiva concentración de poderes.
El referéndum constituye una segunda etapa de un plan aprobado por el presidente luego de haber anunciado la suspensión de las instituciones gubernamentales, incluida la Asamblea del Pueblo, que luego procedió a disolver, además de cambiar la ley que regula el Consejo Supremo de Justicia y el Tribunal Electoral.
Después del referéndum, el principal desafío para el presidente tunecino seguirá siendo la crisis económica que vive el país y lo que genera de incremento en los indicadores de desempleo (un 40 por ciento entre la capa juvenil), el alza de la inflación y la disminución del poder adquisitivo de los ciudadanos.
El Fondo Monetario Internacional anunció el pasado martes que una delegación de sus expertos concluyeron una visita a Túnez en el marco de las negociaciones que lleva a cabo la institución monetaria internacional para el otorgamiento de una ayuda, señalando que las conversaciones entre ambas partes lograron un buen avance.
Las negociaciones entre Túnez y el FMI giran sobre el programa de reformas propuesto por el gobierno encabezado por Najla Boudin, donde el Fondo condiciona el préstamo por otorgar con la realización de reformas radicales.
Los investigadores estiman el préstamo previsto por un valor de dos mil millones de euros y han apuntado que las reformas por realizar podrían agravar aún más las condiciones de vida de los ciudadanos, sobre todo las que tienen que ver con la suspensión de la política de subsidio de las necesidades básicas.