ALBA-TCP pide liberar la tripulación venezolana retenida en Argentina
El ALBA-TCP condenó la política injerencista de EE.UU. y ratificó su compromiso con los postulados de la “Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz” de la CELAC.
Los Estados miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) exigieron la liberación de la tripulación venezolana y la aeronave Boeing 747, secuestrada desde el pasado 8 de junio en Argentina, informó TeleSur.
Por medio de un comunicado, el bloque regional se sumó a la exigencia del pueblo y del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela respecto al avión y sus tripulantes, quienes participaban en diversas tareas de ayuda humanitaria en la región en respuesta a desastres naturales.
Respecto al avión, propiedad de la Empresa de Transporte Aerocargo del Sur (Emtrasur), filial de la aerolínea venezolana Conviasa, ALBA-TCP indicó que “esta retención ilegal e ilegítima constituye una vulneración a los derechos humanos básicos de la tripulación, como la libertad de movimiento y el respeto a la dignidad personal”.
Los Estados miembros del @ALBATCP se suman a la exigencia del pueblo y del Gobierno de Venezuela por la liberación de la tripulación venezolana retenida en forma ilegal e ilegítima por parte de Autoridades Judiciales de la República Argentina.
— Sacha Llorenti (@SachaLlorenti) September 6, 2022
Comunicado: pic.twitter.com/aOImjcnNym
Al respecto, añadió que igualmente emerge como una medida coercitiva unilateral aplicada a Venezuela en medio de maniobras de incumplimiento de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional.
El mecanismo de integración ratificó su inquebrantable compromiso con los postulados de la “Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz” de la CELAC, ante cualquier acción que pretenda quebrantar el espíritu de cooperación y amistad entre los pueblos de naciones hermanas.
El reclamo y condena al secuestro por parte del ALBA-TCP se suma al de varias instituciones, personalidades de diversa índole y pueblo venezolano contra la política intervencionista de Estados Unidos de apropiarse del avión y su tripulación compuesta de 19 personas, entre pilotos venezolanos e iraníes.
El poder judicial argentino formuló acusaciones sin fundamento a los tripulantes de la aeronave, lo que derivó en la incautación y allanamiento de la misma, con la participación de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI, siglas en inglés) de Estados Unidos, sobre la base de un tratado de asistencia jurídica mutua rubricado en 1991 entre Washington y Buenos Aires.