El ejército libanés detuvo a una persona que admitió su responsabilidad en el tráfico ilícito de inmigrantes que iban en la embarcación que se hundió frente a las costas de Siria hace unos días.

De acuerdo con un reporte del Ejército, el 21 de septiembre pasado, la Dirección de Inteligencia arrestó al ciudadano B.D. bajo sospecha de haber participado en el contrabando de inmigrantes ilegales.

Como resultado de la investigación quedó demostrado que estaba involucrado en el manejo de una red activa que opera trasladando a las personas ilegales desde la costa libanesa de Arida por el norte hasta Minya en el sur.

El ciudadano admitió haberse preparado para la reciente operación de contrabando del Líbano hasta Italia por mar, que resultó en el hundimiento del barco frente a las costas sirias.

La investigación, bajo la supervisión del poder judicial competente del detenido continúa, al igual que el seguimiento de la red para detener a sus integrantes.

Mientras, la agencia de noticias SANA informó que el número de víctimas aumentó a 89.

Iskandar Ammar, director de la Autoridad General del Hospital Al-Basel en Tartus, señaló que 14 personas reciben tratamiento médico, incluido dos que se encuentran en cuidados intensivos. 

Por otra parte, el director de los puertos sirios, Samer Kobarli, declaró a la agencia rusa Sputnik que la cantidad de sobrevivientes no ha cambiado, sigue siendo de 20.

También manifestó que las operaciones de búsqueda continúan y avanzan desde el sur de Tartus hasta el norte, incluidas las costas de Jableh, Banias y Arwad.

La televisión siria comunicó que los sobrevivientes expresaron que el barco partió del Líbano hace varios días, con personas de diferentes nacionalidades que tenían la intención de emigrar. Se estima que llevaba entre 100 y 150 libaneses y refugiados sirios y palestinos.

En Líbano está aumentando significativamente la tasa de inmigración, impulsado por un colapso económico devastador que dejó a grandes sectores del pueblo en la pobreza en los últimos años.