Gamal Abdel Nasser y la dignidad de los pueblos árabes
Inspirado en el Movimiento de Liberación Nacional en el llamado Tercer Mundo, Najah Wakim trascendió el escenario político libanés como defensor de la dignidad de los pueblos y del proyecto del expresidente egipcio Gamal Abdel Nasser.
Justo hoy en el 52 aniversario del fallecimiento del padre del panarabismo, el diputado más joven en la historia libanesa preponderó la obra revolucionaria de Nasser (1918-1970) como factor de unidad en la lucha contra el colonialismo y por la libertad.
Abogado de profesión, Wakim significó el liderazgo del exmandatario egipcio en un período de esfuerzos de los pueblos árabes por la dignidad, el respeto y el progreso en todos los campos, incluso en la ciencia y en la producción.
En diálogo con Prensa Latina, el dirigente progresista libanés puntualizó que en la época de Nasser la unidad predominó en los países de la región, a excepción del sector vinculado con el colonialismo y los capitalistas seguidores de los gobiernos reaccionarios.
Fundador del Movimiento del Pueblo en Líbano, Wakim resaltó la fuerza moral y la capacidad de Nasser para romper el monopolio de Occidente en el suministro de armas a las naciones árabes en 1955 y la nacionalización del canal de Suez, un año después.
Para el luchador, el nombre de Gamal Abdel Nasser ilustra la lista de los grandes símbolos de los movimientos de liberación nacional en el Tercer Mundo, junto a Sukarno (Indonesia), Kwame Nkrumah (Ghana), Keïta (Mali), Ahmed Ben Bella (Argelia), Fidel Castro (Cuba) y Che Guevara (Cuba).
En el pensamiento nasserista destacan la liberación nacional, el desarrollo independiente, la justicia social y la igualdad; mientras, a nivel internacional enlaza las causas del socialismo con la creación de un gran bloque de países liberados, añadió.
Al abordar el contexto actual, Wakim consideró necesario retomar un movimiento de liberación árabe en medio del ingreso de una parte de las fuerzas progresistas en un proceso de transformación vergonzoso al salir de la trinchera de lucha y comenzar a lanzar teorías que hablan de la eternidad del capitalismo y la paz y la normalización con la ocupación israelí.
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— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es)September 28, 2022
Seguro de la validez de la esencia del nasserismo como motor impulsor para enfrentar al imperialismo estadounidense y sus aliados, el exdiputado resaltó los intentos de un colectivo de dirigentes, patriotas y hombres de izquierda de crear el Frente Árabe Progresista, lejos de consignas vacías y conscientes del papel histórico.
Gamal Abdel Nasser no inventó el arabismo sino le dio contenido y un proyecto libertador, ahí su gran valor para enfrentar la división social sobre bases étnicas, religiosas y sectarias, agregó.
Como sucedió en los años 50 y 60 del siglo pasado, el movimiento empezó en Asia y África y luego llegó a América Latina, con el ejemplo de la Revolución de Cuba, y para Wakim hoy vive un resurgir en sentido contrario.
El Frente Árabe Progresista intentará forjar procesos democráticos para la liberación de los pueblos de los regímenes reaccionarios y aliados a Estados Unidos e "Israel", aseguró.
A más de cinco décadas del fallecimiento de Nasser, Najah Wakim y la izquierda árabe apuestan por la unidad y la resistencia para construir un mundo multipolar.