Ejército israelí enfrenta serios desafíos
Medios israelíes evalúan la división y la fragmentación al interior del cuerpo armado.
La división de la sociedad israelí forma parte de los desafíos a enfrentar por el ejército de ocupación en la presente coyuntura, informan medios locales.
Para el escritor y comentarista de asuntos militares del sitio web de Walla, Amir Bukhbut, la creciente preocupación por el odio y la fragmentación al interior de la entidad sionista y el intento de los políticos de convertir al ejército en un saco de boxeo, no se puede ignorar ni pasar por alto.
En ese sentido, el analista llamó a los políticos a excluir a los militares de cualquier controversia.
Según algunos observadores, esta conclusión llega cuando los líderes israelíes admiten la exacerbación de la crisis tras los resultados de las últimas elecciones del Knesset.
El exministro de Seguridad Interna, Avigdor Kahlani, teme el destino de "Israel" después de varias generaciones. "Los problemas internos nos destruirán”, subrayó.
Al respecto, el Jefe de Estado Mayor, Aviv Kochavi, advirtió el incremento de las líneas de división y las diferencias sociales durante mucho tiempo.
En el mismo contexto, el primer ministro del gobierno de ocupación israelí, Yair Lapid, refirió la existencia de una serie de desafíos internos a los que se enfrentará el cuerpo armado en los próximos años.
De acuerdo con la autoridad, el primer desafío lo constituyen las grietas en el modelo de ejército popular. A su juicio, el fenómeno de la evasión y rechazo a alistare en las filas del ejército tiende a aumentar.
“El segundo desafío –dijo– son los llamados al uso de la fuerza sin leyes y sin reglas, comportamiento que debilita a la sociedad y al ejército israelíes".
Los resultados de una encuesta de opinión realizada por la Coalición de Movimientos Juveniles plantea que un tercio de los jóvenes israelíes no quieren ser reclutados.
Con anterioridad, el sitio web del Canal 12 publicó detalles de un diálogo entre cinco jefes de Estado Mayor israelíes, donde primó el criterio sobre la débil cohesión interna y la amenaza existencial para "Israel".