El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Nasser Kanaani denunció la muerte de un joven palestino abatido por las fuerzas israelíes en la Cisjordania ocupada.

Los derechos humanos se han convertido en un juguete en manos de algunos gobiernos criminales, aseguró

Kanaani comentó en Twitter los hechos después de ver un video que circuló ampliamente en las redes sociales donde un soldado israelí agrede al joven palestino, identificado como Ammar Mefleh, de 22 años, en la ciudad de Huwara, al sur de Naplusa.

Luego, el hombre parece golpear al soldado israelí, y este le dispare varias veces a quemarropa.

#شاهد لحظة إطلاق جيش الاحتلال النار على شاب في حوارة جنوب #نابلس pic.twitter.com/kYoQFnhjGi

— Newpress | نيو برس (@NewpressPs) December 2, 2022

"El asesinato de Mefleh ante muchos ojos merece una reacción internacional. Sin embargo, los crímenes diarios del régimen sionista no son condenados por los llamados defensores de los derechos humanos, ni se forma una comisión de investigación para tales hechos", tuiteó Kanaani.

Las fuerzas israelíes presentes en el lugar impidieron que los residentes y las ambulancias brindaran ayuda a los jóvenes palestinos heridos, lo que provocó enfrentamientos con los lugareños.

El Ministerio de Salud palestino aseguró que Mefleh murió a causa de heridas críticas.

Mientras tanto, el enviado de las Naciones Unidas para Medio Oriente, Tor Wennesland, dijo en Twitter que estaba horrorizado por el último asesinato.

El primer ministro palestino, Mohammed Shtayyeh, expresó que la ejecución criminal en la ciudad de Huwara refleja el grado de racismo organizado practicado por las fuerzas militares israelíes.

El Premier subrayó que los soldados israelíes se sienten seguros de no ser responsabilizados por sus crímenes, lo que alienta la reiteración de esta práctica, e instó a la Corte Penal Internacional (CPI) a hacer rendir cuentas a los perpetradores.

El Ministerio Palestino de Asuntos Exteriores y Expatriados responsabilizó directamente a "Israel" por el asesinato, afirmando que el crimen prueba una vez más los planes predeterminados del régimen para exacerbar la situación y ampliar el alcance de los asesinatos selectivos de palestinos.

Desde principios de 2022, las tropas israelíes asesinaron a más de 200 palestinos, incluidos más de 50 niños, en la Cisjordania ocupada y el este de Al-Quds, así como en la Franja de Gaza sitiada.

Según Naciones Unidas, el número de muertes en la Palestina ocupada este 2022 es el más alto en 16 años.

Grupos de derechos humanos locales e internacionales condenan el uso excesivo de la fuerza por parte de "Israel" y la "política de disparar a matar" contra los palestinos.