Panorama del año 2022 en Irak
El comienzo del año 2022 fue políticamente difícil en Irak
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Rashid Latif, presidente de Irán.
Desde el centro de Bagdad
El comienzo del año 2022 fue políticamente difícil en Irak. Las prórrogas de las elecciones parlamentarias y lo que siguió pusieron su peso en ese escenario, pese a la celebración de la primera sesión de la Cámara de Representantes.
Mohammad al-Halbousi resultó electo presidente del Consejo por medio de un acuerdo, de poca duración, entre el Movimiento Sadrista y las fuerzas de la Corriente de Al Hikmah y el Partido Democrático del Kurdistán.
La candidatura de Hoshyar Zebari a la presidencia de la república recibió el rechazo judicial.
Por su parte, el Marco de Coordinación logró formar el tercio obstructor y confundió los cálculos de las fuerzas de la alianza tripartita. Ello requirió dos meses completos para que la referida alianza completara consultas y lograra pasar a Rashid Latif a la presidencia de la República y a Mohammad Shia al-Sudani como primer ministro, después un año y días de celebrar elecciones anticipadas.
Desde otro punto en Bagdad
En el orden militar, las operaciones militares turcas se extendieron desde la primavera de 2022 y aún continúan en el norte de Irak. Mientras, las fuerzas iraquíes estuvieron enfrascadas en la persecución de los remanentes de Daesh.
Los ataques de los cazas iraquíes tuvieron como objetivo los movimientos de la agrupación terrorista en Nínive, Kirkuk, Diyala y Anbar.
El auge de la actividad de la banda criminal se consideró un nuevo retorno, aprovechado por los actores internacionales para poner a prueba la relativa estabilidad tras un año de crisis gubernamental.
Sin embargo, las incursiones castrenses también incluyeron ataques de la Guardia Revolucionaria iraní contra los sitios de los separatistas en el Kurdistán iraquí, a quienes Teherán acusó –en un mensaje al interior iraquí y a los operadores– de estar involucrados en eventos internos.
Del mercado de Shorja
Desde el punto de vista económico, el 2002 fue excelente debido al nivel de exportación de petróleo. Las reservas de divisas aumentaron a noventa mil millones de dólares.
Sin embargo, persistió la devualuación del dinar -moneda nacional iraquí- frente al dólar. Las sanciones estadounidenses afectaron a varios bancos privados iraquíes y el mercado de venta de divisas disminuyó para finales de año.
Como parte de las contramedidas, el gobierno intentó recuperar el control del tipo de cambio, y para ello se apoyó en la política del Banco Central de Irak.
En el 2002, la Mesopotamia sufrió una situación espinosa en el expediente del agua.
En el plano cultural, Irak perdió a dos grandes figuras: el poeta Muzaffar al-Nawab y el director de cine Faisal al-Yasiri. Pero se mantuvo en pie al organizar en Basora la edición 25 de la Copa de Naciones del Golfo.
