El conflicto del trabajo esclavo en Brasil
Más de 200 empresarios van a la cárcel cada año en el gigante sudamericano por someter a personas a condiciones análogas a la esclavitud.
Cada año alrededor de 250 empresarios de Brasil son acusados de utilizar mano de obra esclava, afirmó el jefe de Inspección para la Erradicación del Trabajo Esclavo, Maurício Krepsky.
Según el funcionario citado por el diario Brasil de Fato, la Enmienda Constitucional 81 obliga a la expropiación de tierras a empresarios esclavistas, pero eso nunca ocurre pues depende de otra ley que regule el proceso, la cual nunca aprobó el Congreso brasileño.
El pasado 22 de febrero, las autoridades rescataron a 207 trabajadores en situación de esclavitud en las bodegas de Bento Gonçalves, en Río Grande do Sul, la mayor región vinícola del país.
El caso involucra a grandes empresas como Aurora, Garibaldi y Salton, y las víctimas denunciaron el impago de salarios, largas jornadas laborales, violencia física y pésima alimentación.
Antes, otra operación coordinada por el Ministerio de Trabajo y Empleo de Brasil, sacó a 139 personas de una plantación de caña de azúcar en Acreúna en condiciones similares.
El perfil de las personas rescatadas en estas condiciones es semejante: aproximadamente 90 por ciento son hombres, negros, con baja educación y en un rango de edad entre 30 y 39 años.
Las acciones de combate al trabajo esclavo contemporáneo se enmarcan en una política pública que Brasil lanzó en 1995, en un momento de graves denuncias.