Estados Unidos es un socio en la corrupción en el Líbano
El líder de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, llamó a los libaneses a no desesperarse ante la crisis política y económica del país, porque el resultado de ese comportamiento puede conducir a la rendición.
Estados Unidos es socio en la corrupción en el Líbano, impide depósitos, así como la inversión y la ayuda necesaria para la nación, declaró este jueves Sayyed Hassan Nasrallah, secretario general de Hizbullah.
En su discurso, con motivo del aniversario de la Fundación Islámica para la Educación y el nacimiento del Imam Al-Mahdi, el dirigente político llamó a los libaneses a no desesperarse ante la crisis política y económica del país, porque el resultado de ese comportamiento puede conducir a la rendición.
En su opinión, las puertas para una solución existen e instó a no claudicar pese a las difíciles condiciones regionales e internacionales.
Según Nasrallah, la esperanza fue siempre la base principal de la resistencia en todo el Líbano, y ella puede acabar con la era israelí.
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En ese sentido, el jefe de Hizbullah recordó como el enemigo intentó fomentar un espíritu de desesperación en el año 1982 después de la invasión al territorio nacional.
Pero aferrarse a esa esperanza hizo posible el triunfo y los logros alcanzados por la resistencia en las batallas sucesivas, enfatizó.
En otro momento de su intervención, el líder de la Resistencia libanesa argumentó como la esperanza y la resistencia del pueblo fueron capaces de derrumbar el llamado proyecto del Nuevo Medio Oriente, fraguado por Estados Unidos durante años.
También rememoró la participación norteamericana en la masacre de Bir al-Abd, el 8 de marzo de 1985.
En aquel crimen, ocurrido el Día Internacional de la Mujer,75 personas murieron y otros 270 resultaron heridos, la mayoría de las víctimas mortales mujeres y niños.
El objetivo de la masacre de Bir al-Abd, explicó, era sembrar el terror y la desesperanza en los corazones libaneses y asesinar el líder espiritual de Hizbullah, ayatollah Sayyed Mohammad Hussein Fadlallah, quien sobrevivió al ataque genocida.
Sobre aquel incidente criminal, Nasrallah hizo énfasis en poner atención sobre algunos actores políticos, que pese a reclamar la soberanía para Líbano, tienen sus manos involucradas en la masacre.
Al dirigirse a quienes amenazan a Líbano con la muerte y el asedio, el dirigente destacó la férrea voluntad del pueblo y las nuevas generaciones de resistir y derrocar al enemigo.