Presidente de Bolivia aseguró independencia económica de su país
El Producto Interno Bruto (PIB) nominal de Bolivia incrementó de 40 mil 703 millones de dólares en 2021 y a 44 mil 315 millones de dólares en 2022, la cifra más alta de la historia del país.
La independencia económica y soberanía política plenas deben ser resultado del debate y no de la violencia, expresó el presidente de Bolivia, Luis Arce, al cumplir dos años y medio de gestión al frente del gobierno.
El jefe de Estado manifestó su satisfacción por el balance positivo de su administración a pesar de todos los intentos, internos y externos, de acortar su mandato.
Bolivia reconstruye y reactiva su economía en medio de un contexto internacional adverso, dado por las secuelas de la covid-19 y los efectos del conflicto entre Rusia y Ucrania, señaló.
A dos años y medio de Gobierno, nos dirigimos a nuestro querido pueblo boliviano🇧🇴. https://t.co/7pKYTPv2zn
— Luis Alberto Arce Catacora (Lucho Arce) (@LuchoXBolivia) May 10, 2023
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También destacó el adecuado control de la pandemia, la reanudación del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP) y las medidas implementadas desde el primer día para retomar la senda del aumento económico con justicia social.
En 2021, el crecimiento de la economía boliviana superó el seis por ciento, y en 2022 alcanzó el 3,5. Tales resultados son muy importantes no obstante a las intentonas de boicot a la economía y el funesto paro en la ciudad de Santa Cruz entre octubre y noviembre del año pasado, indicó el presidente.
El Producto Interno Bruto (PIB) nominal incrementó a 40 mil 703 millones de dólares en 2021 y a 44 mil 315 millones en 2022, la cifra más alta de la historia del país.
De igual forma, en 2022 el PIB per cápita aumentó en 7,4 por ciento respecto a 2021, al alcanzar los tres mil 691 de dólares. El mejor dato registrado por Bolivia.
En tanto, la desocupación descendió de manera sustancial de un pico de 11 por ciento en 2020 a un nivel de cuatro en el último trimestre de 2022.
La pobreza extrema disminuyó de un 13,7 por ciento en 2020, al 11,1 en 2021, guarismo más bajo en el devenir de la nación.
También la relación entre el 10 por ciento más rico y el 10 más pobre, presenta el nivel más bajo, pues pasó de 27 veces en 2020 a 20 veces en 2021. Ello evidencia el cierre paulatino de las brechas de desigualdad.
Además, Bolivia presenta la tasa de inflación más baja de la región y una de las más bajas del mundo, una hazaña en un contexto internacional adverso.