Sayyed Nasrallah: La batalla con el enemigo israelí no terminó
El secretario general de Hizbullah recordó el Día de la Resistencia y la Liberación del Líbano, pero dejó claro que la confrontación con el régimen sionista no acabó pues mantiene una parte de la tierra ocupada.
La batalla con el enemigo israelí no terminó pues una parte de nuestra tierra está aún ocupada, aseguró el secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, durante un discurso con motivo del Día de la Resistencia y la Liberación del Líbano.
Por eso, resaltó, es necesario revivir la ocasión del 25 de mayo de 2000 y transmitir las experiencias y sacrificios a las generaciones actuales y futuras.
Esa victoria fue resultado de muchos años de sacrificios y debemos evitar perder la gloria lograda, afirmó.
En el Día de la Resistencia y la Liberación, Nasrallah agradeció a todos los que contribuyeron al triunfo, especialmente a los mártires, los heridos, los prisioneros liberados, los muyahidines y todas sus familias.
Gracias a quienes abrazaron, apoyaron y protegieron la resistencia en todas las regiones del Líbano, especialmente en el sur y la Bekaa, afirmó.
Asimismo, mostró su satisfacción hacia los ejércitos libanés y sirio, las fuerzas de seguridad, las facciones palestinas, a todos los líderes y el apoyo a la resistencia, sobre todo desde Irán y Siria.
El 25 de mayo de 2000 las tropas israelíes huyeron del sur del Líbano luego de décadas apostadas de manera ilegal en ese territorio.
Después de la heroica fecha, la entidad ocupante, quien se suponía fuerte y dominante, se transformó y hoy ya no existe el "Gran 'Israel'".
El régimen se esconde detrás de muros, y es incapaz de imponer sus condiciones en ninguna negociación con el pueblo palestino, indicó el líder de Hizbullah.
Tampoco existe ya una hegemonía estadounidense y el mundo se encaminan la multipolaridad, lo cual preocupa a "Israel", consideró.
“La división interna israelí se corresponde con la cohesión y firmeza del eje de la resistencia”, afirmó.
El pilar fundamental de la resistencia es el ser humano
En otro momento de su discurso, Sayyed Nasrallah resaltó la visita a Siria del presidente iraní, Ebrahim Raisi, tras 12 años de guerra en la nación levantina.
Ese viaje y el encuentro con el presidente Bashar Al Assad, confirman la coherencia del eje de la resistencia, reafirmó.
Nasrallah estimó al ser humano, creyente de su causa, su derecho con audacia y coraje, como el pilar fundamental de la resistencia.
Esa corriente en la región tiene hoy una excelente capacidad humana y moral, como se evidencia en Cisjordania, Jerusalén y el resto de la zona.
Nasrallah pidió al primer ministro de la entidad ocupante, Benjamin Netanyahu, no amenazar con una gran guerra, pues la resistencia es quien tiene ese poder en las manos.
Cualquier confrontación bélica incluirá todas las fronteras y sus áreas y campos serán reducidos por cientos de miles de combatientes, certificó.
Al respecto evidenció la superioridad en la dimensión humana y señaló como su punto fuerte, el propio frente interno del enemigo debilitado y enfrentado a una retirada ideológica.
Los israelíes están listos para escapar e intentan hacerlo. Esa, legitimó, es una de las transformaciones importantes.
Entre esos cambios, Nasrallah también mencionó la pérdida de líderes influyentes en la entidad enemiga, a cambio de la abrumadora confianza entre el eje de la resistencia, sus principales figuras y el pueblo. Además, destacó el desarrollo de las capacidades militares de resistencia.
Ante esa realidad, indicó, tenemos la esperanza de la liberación de Palestina, la oración en la Mezquita de Al-Aqsa, la desaparición de la entidad de ocupación y la confianza y certeza en nuestra victoria.
Una guerra conducirá al abismo y desaparición de la entidad sionista
El líder de la resistencia libanesa también se refirió en su intervención a los acuerdos de normalización pactados entre la entidad enemiga y algunos regímenes árabes.
Esos convenios, lamentó, pudieron lograrse con los gobiernos, pero no con sus pueblos y solo hacen crecer la confianza de la resistencia frente a una cultura de entrega, sumisión y compromisos.
La ocupación trata de retratar a las fuerzas de resistencia como dependientes de los países del eje. Esto, dijo, es un error fatal y subestima la capacidad del enemigo.
Palestina y su pueblo son dueños del derecho, la tierra, la causa y sus decisiones, reconoció.
Igualmente, recordó la más reciente incursión israelí en Gaza y exaltó el poder de crecimiento de la resistencia demostrado con la Operación "Venganza de los Libres".
Ante la apabullante victoria palestina el régimen sionista supo que pagaría el precio de cada ataque.
Por ello, insisten en amenazar a los palestinos, pero se retractan de sus ultimatos al Líbano por el pánico en los asentamientos y a las maniobras de Hizbullah.
El enemigo debe temerse a sí mismo, prestar atención, no calcular mal y no cometer ningún error que pueda conducir a una guerra mayor, recalcó.
Paralelamente, les recordó que una beligerancia conducirá al abismo y desaparición de la entidad sionista.
La seguridad y la protección son un requisito previo para cualquier solución económica y política.
Centrado en el caso libanés, Sayyed Nasrallah, recordó al pueblo que la seguridad y la protección son un requisito previo para cualquier solución económica y política.
La ecuación del ejército, el pueblo y la resistencia es un verdadero paraguas de protección, el cual no debe descuidarse ni alejar de la "controversia bizantina", añadió.
En referencia al tema de los refugiados sirios, el líder de Hizbullah llamó a sostener una conversación entre delegaciones del gobierno libanés y el sirio.