El ministro de Energía de “Israel”, Yisrael Katz, rechazó la idea de que Arabia Saudita desarrolle un programa nuclear civil.

Según Reuters, durante mucho tiempo “Tel Aviv” manifestó preocupación porque vecinos potencialmente hostiles utilicen la energía nuclear y otros proyectos desarrollados bajo el Tratado de No Proliferación de 1970 “como una tapadera para fabricar bombas secretas”.

De acuerdo con The New York Times, la iniciativa forma parte de las condiciones de Riad para alcanzar un acuerdo de normalización con “Israel”.

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Conforme a declaraciones de fuentes bien informadas al periódico, Riad busca garantías de seguridad y asistencia de Washington para desarrollar un programa nuclear civil y obtener menos restricciones en las ventas de armas estadounidenses.

Por su lado, el príncipe heredero saudita Mohammed bin Salman enfrenta a rivales nucleares entre ellos en un intento por revivir el programa nuclear del reino y facilitar la transición energética, reveló Intelligence Online.

En agosto del 2020, expertos internacionales identificaron una estructura recién terminada cerca de Riad, quizás uno de los tantos sitios nucleares no declarados.

La administración del presidente estadounidense Donald Trump mantuvo en silencio siete licencias emitidas desde noviembre de 2017, las cuales permitían a las empresas de energía nuclear nacionales intercambiar información tecnológica confidencial con Arabia Saudita a fin de construir un par de centrales nucleares civiles.