Cambio climático amenaza el futuro de los Juegos Olímpicos de Invierno, según un esquiador
Los futuros Juegos Olímpicos de Invierno podrían tener dificultades para encontrar sedes con suficiente nieve y hielo debido al aumento de las temperaturas provocado por el empeoramiento de la crisis climática.
El esquiador de fondo estadounidense Gus Schumacher declaró a Reuters que el aumento de las temperaturas en todo el mundo supone una amenaza para los deportes de invierno.
El esquí de fondo, el biatlón y la mayoría de las pruebas de esquí y snowboard de estilo libre en Zhangjiakou, a unos 200 kilómetros al norte de Pekín, tenían una pequeña capa de nieve natural antes de que comenzaran los Juegos, pero las superficies de competición son todas artificiales.
Para Schumacher, es un indicio de lo que está por venir, ya que la disminución de las precipitaciones limita las opciones de entrenamiento y competición de los competidores.
"Creo que el cambio climático será lo que más afecte a nuestro deporte en los próximos años; hay muchas cosas que cambian en el esquí, pero ésta es la que va a hacer que no sea posible", añadió.
Mientras que la nieve "adherente" proporciona a los snowboarders y a los esquiadores de estilo libre un mejor control al descender las colinas, los esquiadores de fondo y los biatletas han encontrado un reto en la nieve seca con temperaturas gélidas.
El Comité Olímpico Internacional (COI) ha rechazado las críticas a la decisión de China de utilizar nieve artificial.
La directora de desarrollo corporativo y sostenible del COI, Marie Sallois, declaró a Reuters que "la nieve artificial se utiliza de forma sistemática desde hace décadas en los deportes de competición de invierno. También se utiliza mucho para los deportes de invierno de ocio, como sabemos, nosotros mismos practicamos deportes de invierno".
"Los Juegos Olímpicos de Invierno no son una excepción. Lo que es realmente importante, como para cualquier otra actividad que practiquemos, es intentar hacerlo de la manera más eficiente, y esto es lo que creo que Pekín 2022 está intentando conseguir", añadió.
El uso de nieve artificial, según el esquiador Schumacher, tiene un impacto tanto en el deporte como en el medio ambiente.
El cambio climático, en su opinión, podría poner en peligro el futuro de los deportes de invierno.
"Ya lo está cambiando: hay menos seguridad en las carreras, menos pistas de calentamiento, menos lugares para esquiar y, por tanto, menos gente interesada en hacerlo".