Dos goles de Bruno Fernandes en los minutos 54 y el descuento (90+3), el segundo tras la revisión por el árbitro asistente de video (VAR), dieron a los lusos su segundo triunfo del certamen después de debutar con éxito de 3-2 ante los ghaneses.

Luego de una primera mitad igualada con más control y peligro de los portugueses, llegó el primer tanto de los europeos con un centro de Fernandes que Cristiano Ronaldo no logró cabecear, pero descolocó al arquero Sergio Rochet.

Ya en el tiempo adicional, una mano del uruguayo José María Giménez advertida por el VAR, sentenció a los sudamericanos.

Los lusos tomaron desquite del revés sufrido en los octavos de final de la cita universal de Rusia 2018, al aprovechar sus opciones y proponer más que su rival.

La bicampeona del mundo optó por un fútbol conservador ya desde su alineación, con una defensa de cinco, que intentó controlar cualquier la ofensiva de los dirigidos por Fernando Santos.

Sin embargo, apenas llegaron al área de Diogo Costa, con muy poco de Federico Valverde, Darwin Núñez y Edinson Cavani.

Uruguay, que empató en su debut sin dianas ante Surcorea, quedó así al borde del abismo al no tener capacidad de reacción ante la firme zaga portuguesa.