China apuesta por el turismo orbital
China está trabajando en naves espaciales más eficientes para el turismo orbital. Sus especialistas desarrollan el cohete reutilizable Long March 2F, capaz de enviar a una tripulación de tres personas a la estación.
China está planeando emprender vuelos comerciales a la estación espacial Tiangong y trabaja en naves espaciales más eficientes para el turismo orbital, informó el portal Space.com, citando a varias personas vinculadas al programa espacial el país asiático.
El primer taikonauta, Yang Liwei, afirmó el 7 de marzo a un medio chino que los vuelos turísticos “pueden realizarse dentro de una década, si hay esa demanda” y precisó que “no es una cuestión de tecnología, sino de demanda”.
Dos días después, el diseñador jefe del programa espacial tripulado chino, Zhou Jianping, corroboró las afirmaciones del taikonauta, señalando a Global Times que la nave espacial Shenzhou, actualmente en desarrollo, se podrá utilizar para transportar turistas.
Una vez que la estación se complete, podrá alojar a seis personas, afirmó.
China está trabajando en naves espaciales más eficientes para el turismo orbital. Sus especialistas desarrollan el cohete reutilizable Long March 2F, capaz de enviar a una tripulación de tres personas a la estación.
En octubre, la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial de China informó sobre el diseño de una nave reutilizable de nueva generación, que podría transportar a la Tiangong a seis o siete personas.
El módulo central de Tiangong fue lanzado a la órbita en abril de 2021. Cuando sea completada en 2022, la estación, en forma de letra T, constará de un módulo clave en el centro y cápsulas de laboratorio en ambos lados. Operará en la órbita terrestre baja, entre 340 y 450 kilómetros de altitud.
La vida útil de Tiangong será de 10 años, aunque los expertos chinos creen que incluso podría superar los 15 años con un mantenimiento adecuado y las reparaciones pertinentes.