Un equipo de trabajo liderado por la Universidad de Southampton, en Reino Unido, captó la mayor explosión cósmica jamás registrada. 

Localizado a ocho mil millones de años luz, el evento resultó ser diez veces más brillante que muchos otros.

Además, hasta ahora el fenómeno duró cerca de tres años y ese dato lo convirtió en el más energético de los registrados. 

La mayoría de las supernovas, es decir, el estallido de las estrellas masivas en estado moribundo, son visibles durante meses.

Sin embargo, los expertos localizaron el suceso descrito en 2020 y desde entonces una red de telescopios logró su estudio sin obstáculos. 

"Algo que brillara durante más de dos años fue inmediatamente muy inusual. Lo descubrimos por casualidad", reveló Philip Wiseman, líder del proyecto.

Entre las hipótesis sobre su surgimiento, los especialistas explicaron que un agujero negro atrajo a una nube gaseosa, posiblemente miles de veces mayor que nuestro Sol.

Sin embargo, este no el acontecimiento cósmico más brillante, pues el año pasado los científicos detectaron una explosión aún más reluciente, pero duró unos pocos minutos.