Pintar sobre cohetes: Los artistas crean una y otra vez en Palestina
Sus esculturas y bocetos tienen como centro el vacío físico y mental o las tradiciones de la costa mediterránea.
Una joven junto a su tocador en ruinas es uno de los tantos grafitis que tapizan las paredes de la Franja de Gaza, en Palestina, donde, además, es posible encontrar un niño ondeando la bandera nacional, escombros, misiles, humo, consternación…
Resistencia. Así le llaman los artistas a esta forma de adornar con pintura fresca y vibrante las paredes marcadas por la metralla.
El grupo cultural Shababik ve, oye, siente muchas cosas allí, y es uno de los pocos conjuntos de autores activos en todo el territorio.
A pesar de las limitaciones, ellos ofrecen una plataforma para practicar las nuevas formas de arte e inspirar a las futuras generaciones.
"Hay una escuela tradicional en Gaza, pero somos el único lugar que trabaja con plásticos, escultura moderna y otras variantes contemporáneas", dijo a The Guardian el cofundador de Shababik, Shareef Serhan.
Algunas trabajos tienen como centro el vacío mental y representan desde tormentos de la psique hasta huecos de los edificios destruidos
Otros, en cambio, toman inspiración en la costa mediterránea y muestran a las sirenas de las leyendes de los pescadores o a cientos de mujeres en las recogidas de frutas.
Los costos de los materiales y los desafíos para adquirirlos conllevan a la utilización de productos reciclados, incluidos los escombros y el metal.
No obstante, los artistas entrevistados por el medio británico declararon que ellos seguirían en la Franja de Gaza, aunque se muden a otro sitio, porque ellos de son de allí como los grafitis, los niños alados y la bandera de un país llamado Palestina.