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Cada vez que el músico de Reino Unido Roger Waters se entrega en cuerpo y alma a las grandes causas, las chispas que deja a su paso parecen estallar. 

Lo hizo al denunciar los crímenes perpetrados por "Israel" en Palestina o al llamar a la lucha contra el fascismo, en una reciente gira por Sudamérica. 

Y ahora lo repitió al responder en entrevista ante el exdirector de News of the World, el periodista británico Piers Morgan.

El anuncio del conductor fue incómodo, grosero, torcido. Basta entrar a Instagram. Leer sus primeras oraciones. Escucharle llamar tonto al indiscutible ícono de la cultura pop, cofundador del mítico grupo Pink Floyd. 

Al hablar sobre el inicio de la Operación Diluvio de Al Aqsa, el autor de temas clásicos como Comfortable numb recordó el derecho de Palestina a defenderse ante las fuerzas coloniales. 

Subrayó que si alguien invade un país, expulsa a la gente sus hogares, le roba sus tierras y las ocupa durante 75 años, los legítimos herederos de este territorio “tienen el derecho absoluto a la resistencia armada”. 

También denunció las acusaciones del sionismo de "falsas banderas", y desmintió la supuesta evidencia sobre bebés quemados y mujeres violadas el 7 de octubre.   

“No, no fue así (…) No hay pruebas. Puedes decir lo que quieras, pero no hay pruebas”, afirmó el también cantante y bajista. 

De igual forma, cuestionó la demora de “Tel Aviv” en defenderse y sugirió la posibilidad de un autoataque.

Por años, Roger Waters incomodó a ciertos círculos políticos. Comparó a un cerdo con el capitalismo salvaje en Animals (1977), repudió el asesinato de la niña judía Ana Frank en The Powers That Be (1987) y mostró los desmanes de las tropas estadounidenses en Irak en Run Like Hell (2014). 

A cierta prensa no le gusta su actitud e intenta descalificar su entrega artística, pero el músico continúa llenando estadios y agitando las brasas.