Expertos de la ONU piden sanciones y embargo de armas contra "Israel"
La declaración responde a la reciente opinión consultiva histórica de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de que la ocupación israelí del territorio palestino es ilegal y debe terminar "lo más rápidamente posible".
Un grupo de 38 expertos independientes de las Naciones Unidas en derechos humanos, designados por el Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, pidió a los Estados miembros de la organización imponer un embargo de armas y sanciones específicas a "Israel".
En una declaración conjunta, los especialistas instaron a los estados miembros de la ONU a "revisar inmediatamente todos los vínculos diplomáticos, políticos y económicos con Israel, incluidos los negocios y las finanzas, los fondos de pensiones, el mundo académico y las organizaciones benéficas".
También, añadieron que los Estados deben imponer sanciones específicas al régimen de "Tel Aviv" e investigar a los ciudadanos con doble nacionalidad implicados en delitos mientras servían en el ejército israelí o en la violencia de los colonos en la Cisjordania ocupada.
El pedido llegó luego de que el Reino Unido indicó que está estudiando restringir algunas, pero no todas, las ventas de armas a "Israel" aunque no ha ofrecido un calendario para la decisión.
Los informes afirmaron que el gobierno laborista está revisando evidencia para identificar qué armas fabricadas en el Reino Unido pueden haber sido utilizadas en presuntos crímenes de guerra en Gaza.
La declaración de los expertos de la ONU respondió a la reciente opinión consultiva histórica de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de que la ocupación israelí del territorio palestino es ilegal y debe terminar "lo más rápidamente posible".
Los jueces de la CIJ dictaminaron que los Estados miembros tienen el deber de "tomar medidas para impedir las relaciones comerciales o de inversión que contribuyan al mantenimiento de la situación ilegal creada por Israel".
Por su parte, los expertos de la ONU afirmaron: “La opinión consultiva reafirma las normas perentorias que prohíben la anexión, los asentamientos, la segregación racial y el apartheid, y debe ser vista como de naturaleza declaratoria y vinculante para Israel y todos los Estados que apoyan la ocupación”.