Trump invita a Xi Jinping a su toma de posesión
El presidente electo invitó al mandatario chino a principios de noviembre, poco después de las elecciones, confirmaron las fuentes, pero no estaba claro si había aceptado la invitación.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, invitó al mandatario de China, Xi Jinping, a asistir a su toma de posesión el próximo mes, informaron varias fuentes a CBS News.
Trump invitó a Xi a principios de noviembre, poco después de las elecciones, confirmaron las fuentes, pero no estaba claro si había aceptado la invitación.
Un portavoz de la embajada china en Washington no hizo comentarios de inmediato.
La portavoz de transición Karoline Leavitt expresó a CBS News que Trump invitó a Xi a la inauguración.
Leavitt refirió a Fox News que se trata de un ejemplo de cómo Trump "crea un diálogo abierto con líderes de países que no son sólo nuestros aliados, sino también nuestros adversarios y competidores".
Además de Xi, el equipo del mandatario electo planteó la posibilidad de recibir a otros líderes en el Capitolio el 20 de enero.
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, que tiene una cálida relación con Trump y lo visitó en Mar-a-Lago esta semana, "todavía está considerando" si asistirá, según una fuente familiarizada con los planes del jefe de gobierno europeo.
Los embajadores y otros diplomáticos suelen ser invitados a las inauguraciones, pero los registros del Departamento de Estado que datan de 1874 muestran que un líder extranjero nunca ha asistido a una ceremonia de transferencia de poder.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, expresó esta semana que "dependerá del presidente electo Trump decidir quién se sentará con él en la inauguración, quién estará allí".
Los miembros del círculo íntimo de Trump siguen siendo fuertes críticos del gobierno de Xi, incluido el senador Marco Rubio, su elegido para ser secretario de Estado, y el nuevo asesor de seguridad nacional Mike Waltz.
El propio Trump amenazó con aumentar los aranceles a los productos procedentes de China.
Estados Unidos impuso una fecha límite del 19 de enero, víspera de la investidura, para que la empresa matriz china de TikTok, ByteDance, venda la aplicación de redes sociales o se enfrente a una prohibición en territorio norteamericano.
TikTok está luchando contra la prohibición en los tribunales: perdió un intento la semana pasada de bloquear la prohibición, pero está apelando el caso ante la Corte Suprema.
Pero Trump también cree desde hace tiempo que las relaciones estrechas entre líderes son clave para la negociación internacional. Desde el día de las elecciones, varios líderes mundiales han viajado a Mar-a-Lago para reunirse con Trump, incluido el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
El presidente de Argentina, Javier Milei, también recibió audiencias privadas con Trump.
Recientemente, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, fue el primer líder mundial que recibió a Trump en el extranjero desde que ganó las elecciones de 2024.
A la reapertura de la catedral de Notre Dame en París también asistieron la primera ministra italiana, Georgia Meloni, el mandatario ucraniano, Volodomyr Zelensky, y el príncipe William.
En su primera investidura en 2017, Trump era prácticamente un desconocido en el escenario mundial y esta vez, los líderes lo tratan esencialmente como un titular en el cargo.