Caótica situación en cárcel de Ecuador deja varios muertos y heridos
Los disturbios en la Penitenciaría del Litoral están protagonizados por dos bandas rivales dentro de la institución penal.
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Más de mil 500 efectivos de la Policía Nacional y mil 200 de las Fuerzas Armadas entraron para restablecer el orden en la cárcel, así como buscar armas, explosivos y municiones.
Militares y policías ecuatoriamos ingresaron a la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil para retomar el control luego de los violentos disturbios donde cerca de 18 reclusos murieron y once resultaron lesionados, incluido un militar.
Anteriormente, el ministro del Interior Juan Zapata, describió el despliegue de mil 500 efectivos de la Policía Nacional y mil 200 uniformados de las Fuerzas Armadas para restablecer el orden, así como buscar armas, explosivos y municiones.
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Una vez tomado el control de las instalaciones de la Penitenciaria, la Fiscalía indicó proceder con el levantamiento de los cadáveres y recolección de indicios.
El gobierno de Guillermo Lasso declaró este martes el estado de excepción en todas las cárceles del país tras los graves disturbios en Guayaquil.
Durante 60 días estará vigente la medida para permitir a efectivos de la policía y las fuerzas armadas restablecer el orden en las prisiones.
Integrada en un complejo de prisiones, el Litoral se considera la cárcel más peligrosa de Ecuador. Su capacidad es para nueve mil 500 internos, aunque hasta el primer trimestre de este año superaba esa cifra en casi tres mil personas.
Los disturbios se produjeron por una disputa entre dos bandas dentro de la cárcel. Igualmente, en otras diez instituciones penitenciarias los reos declararon una huelga de hambre y retuvieron a un número indeterminado de guardias penitenciarios, de los cuales 131 ya fueron liberados, según el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI).
Los presos exigen, entre otras cosas, mejoras en la alimentación y las condiciones sanitarias de los centros.
La declaración del estado de excepción es la segunda medida drástica tomada por el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, en menos de 24 horas por la nueva oleada de violencia que vive el país andino.
Lasso ya decretó el lunes una emergencia similar en las provincias de Los Ríos y Manabí, después del asesinato del alcalde de la ciudad de Manta, Agustín Intriago.
Todo esto se produce a menos de un mes de las próximas elecciones presidenciales de Ecuador, convocadas por Lasso para el próximo 20 de agosto.
Más de 468 personas murieron desde 2020 en incidentes en las cárceles de Ecuador, donde las pandillas protagonizan frecuentes disputas, en línea con el aumento generalizado de la violencia perpetrada por grupos delictivos en todo el país.
