Arbaín sorprende al mundo entero, aseguró presidente de Irak
El mensaje de Arbaín incluye las epopeyas heroicas más asombrosas y las grandes lecciones del Imam Hussein (P), quien no aceptó la opresión de la tiranía, la violación a la justicia y desafió el gobierno autoritario, destacó el jefe de Estado.
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Más de 22 millones de visitantes acuden en masa a Kerbala.
Las imágenes más bellas de los amantes del Imam Hussein (P) sorprendieron al mundo entero en la enorme caminata de Arbaín, expresó el presidente de Irak, Abdul Latif Rashid.
El jefe de Estado resaltó la generosidad y sacrificio del pueblo iraquí por su hospitalidad en días importantes para la comunidad islámica.
En su opinión, el mensaje de Arbaín incluye las epopeyas heroicas más asombrosas y las grandes lecciones del Imam Hussein (P), quien no aceptó la opresión de la tiranía, la violación a la justicia y desafió el gobierno autoritario.
La caminata más grande del mundo, Arbaín, continuó en Irak con la presencia de millones de peregrinos procedentes de más de 30 países.
La peregrinación comienzó desde la ciudad de Nayaf y terminará en Kerbala, donde está la tumba del Imam Hussein (P). La mayoría de los fieles marcharon descalzos para expresar su especial honradez.
Más de 22 millones de visitantes acuden en masa a Kerbala
Desde las primeras horas de la mañana de este miércoles, la ciudad de Kerbala, en el centro de Irak, fue testigo de una afluencia de millones de dolientes musulmanes para conmemorar el Día de Arbaín.
La multitud alcanzó su punto máximo en la noche del martes, con más de tres millones y medio de visitantes procedentes de fuera de Irak, unido a los nacionales.
Según el Santuario de Al-Abbas, el número de visitantes para la efeméride este año superó los 22 millones de personas.
El pueblo de Irán también celebró este miércoles una ceremonia fúnebre por el Arbaín en presencia del líder Sayyed Ali Khamenei y de una multitud de estudiantes en la Husseiniya del Imam Jomeini en Teherán, la capital del país.
En Siria, miles de personas recorrieron 14 kilómetros, desde el santuario de la Sayyidah Ruqayyah hasta la ermita de la Sayyidah Zainab en Damasco, para conmemorar la fecha sagrada.
