El gobierno interino de Líbano ordenó fortalecer el control en los puntos fronterizos con el objetivo de evitar la entrada ilegal de ciudadanos sirios y combatir el tráfico de personas.

En reunión consultiva, el gabinete pidió a los servicios militares y de seguridad una mayor coordinación entre sí para mejorar las posiciones en las rutas utilizadas por los infiltrados, implementar operaciones conjuntas y atacar las redes de contrabando.

A propósito, el ejecutivo reclamó intensificar los esfuerzos de información para el control de las fronteras terrestres y marítimas.

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Al respecto, también solicitó al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados aumentar la colaboración con los ministerios y agencias militares libaneses con el fin de proporcionar condiciones apropiadas e inmediatas para el regreso seguro de los sirios a su país.

En este sentido, convocó a robustecer los canales diplomáticos para explicar la gravedad de esta cuestión al Líbano y a la seguridad regional y europea, a la luz de la disminución de las capacidades para vigilar las operaciones de tráfico.

Al mismo tiempo, el gobierno pidió al Ministerio de Justicia endurecer los procedimientos legales contra los contrabandistas y los ciudadanos ingresados al país por vías irregulares.

Otra de las disipaciones incluyó eliminar las infracciones y violaciones de las infraestructuras (electricidad, agua, alcantarillado) situadas en los lugares de residencia de los desplazados, además del estricto cumplimiento de la legislación sobre circulación.

De acuerdo con fuentes militares, alrededor de ocho mil sirios entraron recientemente a Líbano, el 95 por ciento son jóvenes, quienes también utilizan a la nación como línea de tránsito para la inmigración ilegal hacia Europa.

La semana pasada, el ministro de Asuntos Sociales de Líbano, Héctor Hajjar, condenó el bloqueo económico a Siria por medio de la Ley César" y culpó a la administración de Estados Unidos del nuevo desplazamiento.

En declaraciones a Al Mayadeen, el titular también responsabilizó a la comunidad internacional de las repercusiones de la crisis de los refugiados sirios en suelo libanés.