Reino Unido no es competidor, ni rival, ni enemigo de China, pero debe conocer su tamaño en la escena internacional y no exagerar, consideró el portavoz del Partido Comunista del gigante asiático, Victor Gao.

En una entrevista en la televisión británica LBC, el funcionario respondió así a una interrogante sobre la propia definición de Beijing ante Londres.

Con respecto a las relaciones bilaterales, Gao aseguró que Gran Bretaña es sólo un país importante con el que tratar en tiempos de concordia para lograr intereses comunes. En ese sentido, lo instó a hacer la paz en lugar de provocar la guerra.

Igualmente, reafirmó lo completamente engañoso para Inglaterra de ver a Beijing como un competidor.

No obstante, avizoró que su país será líder mundial en el campo de la fabricación de vehículos o suministro de coches eléctricos, en la elaboración de semiconductores, y en la revolución de la inteligencia artificial. 

En ese sentido, pidió al gobierno británico no sobreestimar su influencia en el ámbito global y aparecer como un competidor de China.

Investigadores chinos trabajan en la elaboración de nuevas tecnologías basadas en el uso de óxido de galio para la industria de semiconductores, destacó.

Al respecto, comunicó que esos adelantos darían a Beijing la capacidad de desafiar el embargo impuesto por los Estados Unidos en su contra.