Organizaciones internacionales respondieron al escepticismo expresado por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, sobre el número de víctimas de las masacres perpetradas por el ente ocupante de "Israel" en Palestina.

Las instituciones de derechos humanos confirmaron que las cifras anunciadas son "en gran medida precisas y están bien documentadas".

En particular, el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza incluyó en un documento de 212 páginas los nombres y números de identidad de más de siete mil ciudadanos.

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Por su parte, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios anunció que los datos de la cartera forman parte de sus informes, "y claramente tiene su base en fuentes".

Human Rights Watch también confirmó la fiabilidad de las estadísticas y la existencia de grandes discrepancias al verificar los ataques anteriores.

Mientras, la Organización Mundial de la Salud estimó la presencia de alrededor de mil cadáveres bajo los escombros. 

El miércoles 25 de octubre, Biden trató de sembrar dudas sobre el balance oficial de la actual crisis y afirmó que no sabía "si los palestinos dicen la verdad". 

Anteriormente, Washington también recurrió al engaño para encubrir crímenes e inventó noticias sobre el bombardeo por parte de la ocupación al Hospital Nacional Bautista en Gaza.