EE.UU. está solo en el estrecho de Bab el-Mandeb
El presunto esfuerzo para salvaguardar la libertad de navegación en el mar Rojo, liderado por Washington, enfrenta obstáculos significativos.
La renuencia de las naciones europeas a unirse a la operación "Guardián de la Prosperidad", liderada por Estados Unidos, revela su fracaso, señaló sitio web israelí Globes.
De acuerdo con la publicación, la gestión de Washington enfrenta obstáculos significativos, ya que solo 10 países expresaron de manera pública su disposición a participar, pero algunos de ellos no especificaron su nivel de implicación.
A juicio de expertos, el hecho de que las naciones ribereñas del mar Rojo decidieran no adherirse a la alianza jugó en contra de los intereses de Estados Unidos en la zona.
La causa del estancamiento es atribuida al rechazo a las acciones de “Israel” en Gaza, aunque ningún líder europeo lo expresó de manera pública, apuntó Globes.
Sin embargo, analistas políticos del viejo continente consideraron el conflicto árabe-israelí como la causa principal de la no vinculación de algunos actores occidentales y regionales a la alianza marítima.
La actitud reservada de los países europeos hacia la coalición marítima reflejó el temor a ser percibidas como socios de “Israel” en la masacre en Gaza y la fragilidad de una alianza occidental.
De acuerdo con los informes, las únicas naves presentes en la región son estadounidenses, británicas y francesas, un indicativo de que Estados Unidos está solo en este esfuerzo cuando intenta transmitir un mensaje contundente desde el estrecho de Bab el Mandeb al mundo entero.
Por tanto, el papel Estados Unidos en el emergente eje occidental como policía mundial ahora está en tela de juicio, subrayó Globes.