Siete sindicatos nacionales y más de 200 locales en Estados Unidos formaron una coalición para presionar por el cese del fuego de "Israel" en la Franja de Gaza.

La coalición representa a más de nueve millones de trabajadores sindicalizados, más de la mitad del movimiento laboral en la nación norteamericana. 

Recientemente, una gran marcha en Washington exigió el fin de la ocupación sionista en Gaza, así como el final de la agresión contra la ciudad de Rafah. 

Los participantes en la manifestación se congregaron frente al Capitolio para presionar a los miembros del Congreso para que obliguen a “Israel” a detener su masacre. 

A pesar de las protestas en todo el mundo exigiendo el cese del fuego en Gaza, la administración estadounidense continúa brindando su apoyo político y militar a "Tel Aviv".

Este sábado, el presidente estadounidense, Joe Biden, y el primer ministro de la entidad de ocupación, Benjamín Netanyahu, discutieron la "operación militar" posible en Rafah.

De acuerdo con la Casa Blanca, durante la llamada telefónica, Biden aseguró a Netanyahu que "la operación militar en Rafah no debería llevarse a cabo sin un plan confiable y ejecutable para garantizar la seguridad y el apoyo a los civiles allí". 

La revista Foreign Policy informó que Biden está perdiendo votantes negros debido a la guerra en Gaza. 

En este contexto, la Iglesia Metodista Episcopal Africana, que cuenta con tres millones de miembros en Estados Unidos, instó a la Casa Blanca a detener la ayuda militar a “Israel” y prevenir el genocidio. 

Días atrás, el Senado norteamericano votó a favor de destinar un paquete de ayuda de 95.34 mil millones de dólares para Ucrania, "Israel" y Taiwán, mientras finge preocuparse por los civiles en Gaza y la necesidad de proporcionar ayuda humanitaria.