China y EE. UU. dialogan sobre sus relaciones bilaterales
Un terreno libre de conflictos y confrontaciones, abstenerse de hacer retroceder la relación o cruzar fronteras, y mantener la honestidad y el respeto a los compromisos son los principios resaltados por el presidente chino en una llamada telefónica a su homólogo, Joe Biden.
El presidente de China, Xi Jinping, habló por teléfono con su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, para intercambiar opiniones sobre las relaciones bilaterales y cuestiones de interés común, informaron medios de prensa asiáticos.
A juicio de Jinping, las relaciones entre ambos países comenzaron a estabilizarse, pero también aumentan los factores negativos en ellas, por lo cual es importante poner atención de ambas partes.
Sin embargo, enfatizó, dos países importantes como China y Estados Unidos no deben romper sus relaciones, o darse la espalda el uno al otro, ni caer en conflicto o confrontación.
Lejos de eso, deben tener respeto mutuo y coexistir en paz, a partir de tres principios integrales para 2024, detalló el mandatario chino:
Primero, establecer un terreno libre de conflictos y confrontaciones, segundo, abstenerse de hacer retroceder la relación, provocar cualquier incidente o cruzar fronteras, y tercero, mantener la honestidad y el respeto a los compromisos.
La cuestión de Taiwán es la primera línea roja a no sobrepasar, puntualizó Xi, pues China no se quedará de brazos cruzados ante el estímulo y apoyo externos a las actividades sobre la secesión de esa provincia.
Al mismo tiempo, instó a la parte estadounidense a traducir en medidas concretas el compromiso del presidente Biden de no apoyar dicha secesión.
Los medios chinos comentaron sobre una serie de medidas adoptadas por Estados Unidos para suprimir el desarrollo del comercio y la tecnología del gigante asiático, como agregar más empresas a las listas de sanciones, lo cual crea más riesgos, no los evita.
Señalaron además, que si la administración estadounidense está decidida a contener el legítimo derecho al desarrollo de alta tecnología en China, entonces Beijing no se quedará impasible.