“Israel” sopesa consecuencias de no recibir armas de EE. UU.
Altos funcionarios del gobierno sionista escucharon con preocupación las medidas previstas por el presidente Joe Biden si su aliado en Medio Oriente continúa sus planes de invadir el enclave sureño de Rafah.
La declaración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre la suspensión de envíos de armas a “Israel” perjudicará los planes operativos en la guerra y empujará a "Israel" a gestionar la "economía armamentística", valoró este jueves un alto funcionario de “Tel Aviv”.
En declaraciones a la emisora israelí Kan, el entrevistado asoció el retraso en abril de las entregas por parte de la administración estadounidense con el aumento de las operaciones militares en Rafah, al sur de la Franja de Gaza.
También fuentes de seguridad interna mostraron alarma ante la medida de limitar el suministro de municiones a la fuerza aérea y la artillería, pues aunque no afectará los priorizados combates en la Franja de Gaza, pudiera impactar en los preparativos del ejército para asumir otros frentes “si estallan guerras allí”.
A criterio de un alto oficial sionista citado por el periódico Haaretz, "cuando los estadounidenses advierten, hay que escucharlos", pues quienes toman las palabras de Biden como simples amenazas, se equivocan, aseguró.
Por su parte, el mandatario norteño confirmó este miércoles a la cadena estadounidense CNN la voluntad de la Casa Blanca de no suministrar más ciertos recursos al gobierno de Benjamín Netanyahu si su gabinete de guerra concreta un asalto a Rafah “a gran escala”.
Como admitió el inquilino de la Casa Blanca y principal aliado de la entidad de ocupación, hay civiles muertos en la Franja de Gaza “a causa de estas bombas y de otros métodos que dañan los centros de población”, y por tanto “dejó clara” su negativa a proporcionar de nuevo armas usadas para atacar ciudades.
Pero esa medida será aplicada sólo si “entran en Rafah”, y para Biden, las acciones del pasado lunes para capturar el paso fronterizo y las masacres cometidas desde entonces contra varias familias en el enclave sureño, no significan aún un cruce significativo de su línea roja personal.
La declaración del presidente estadounidense provocó críticas en “Israel” y el embajador ante las Naciones Unidas, Gilad Erdan, la consideró “dura y muy decepcionante”, sobre todo porque proviene de un presidente “al que hemos estado agradecidos desde el comienzo de la guerra".
Además, el ministro de Seguridad Nacional de la ocupación, Itamar Ben Gvir, causó revuelo al dar a entender en su cuenta de la plataforma X que Hamas ama a Biden por su nueva posición.