Sin señales de agresión sexual en la Operación Diluvio de Al Aqsa
The Associated Press (AP) coincide en que no existieron señales de agresión sexual por parte del movimiento de resistencia palestina Hamas contra mujeres israelíes durante la Operación Diluvio de Al Aqsa.
Cuando el movimiento de resistencia palestina Hamas lanzó el pasado 7 de octubre la Operación Diluvio de Al Aqsa, la entidad de ocupación inventó afirmaciones de que los combatientes agredieron sexualmente a mujeres israelíes en el lugar del festival de música para acaparar el apoyo internacional a su genocidio.
Desde entonces, el inquietante intento sionista de escudriñar públicamente a la resistencia acusando falsamente a sus combatientes de violar a mujeres colonas ha sido desacreditado múltiples veces.
Las falsas acusaciones se basaron en gran medida en testimonios presentados por ZAKA, un grupo de rescate israelí que mostró un informe a la ONU. Luego el propio fundador del referido coelctivo, Meshi-Zahav, fue condenado por violación y por explotar su poder para agredir sexualmente a niñas.
The Associated Press (AP), en este contexto, examinó los testimonios de dos voluntarios de ZAKA y descubrió que la agrupación engañó al público mundial con respecto a las agresiones a mujeres israelíes.
Falsos Testimonios
La agencia transmitió el testimonio de un voluntario, llamado Chaim Otmazgin, quien recogió cadáveres después de la operación y basó su discurso en una "interpretación del abuso sexual" más que en pruebas.
Según informó el medio, Otmazgin encontró el cuerpo de una adolescente israelí a quien le bajaron los pantalones y, por eso, automáticamente asumió que fue violada.
Cuando les contó a los legisladores y periodistas lo que había visto, le pidieron interpretaciones. Sin embargo, ahora afirma que nunca dijo que hubo agresión sexual, aunque AP encontró que su testimonio aludía en gran medida a eso.
Tres meses después del testimonio, ZAKA informó que la interpretación de Otmazgin era errónea y descubrió que un grupo de soldados de la entidad arrastró "el cuerpo de la niña por la habitación para asegurarse de que no tenía trampas explosivas", razón por la cual tenía los pantalones bajados.
Otro testimonio fue el de Yossi Landau, quien afirmó ver a una mujer embarazada cuyo feto todavía estaba adherido a su cordón umbilical, pero fuera de su cuerpo.
En este punto, comentaron que Landau llamó a Otmazgin al verlo, pero este último negó su testimonio.
De acuerdo con Otmazgin, lo que vio fue una mujer pesada y un bulto no identificable que estaba atado a un cable eléctrico. Sin embargo, Landau manifestó de forma deliberada a los medios globales lo que vio falsamente.
El caso que engañó al público
Tras los acontecimientos del 7 de octubre, el protocolo estándar de “Israel” para tales ataques no puedo utilizarse debido a su magnitud e imprevisto. Por lo tanto, la ocupación empleó sus fuerzas en dos asentamientos concentrados, Sderot y Ofakim, y descuidó el lugar del festival.
Los expertos forenses que fueron desplegados después se dispersaron por la zona de la actividad. Sin embargo, el grupo responsable de recoger los cuerpos de los colonos estaba formado por tres mil trabajadores voluntarios, en su mayoría judíos ortodoxos, que no estaban cualificados para determinar si ocurrió algún caso de agresión sexual.
Además, se les encomendó la tarea de separar a los colonos de los combatientes de Hamas martirizados durante la operación, por lo que no buscaban signos de presunta agresión sexual.
En este sentido, cuando los periodistas entrevistaron a los voluntarios de ZAKA se desestimó el protocolo habitual que permitía a voluntarios no cualificados dar sus testimonios sin consultar con el portavoz oficial.
Al respecto, transmitieron lo que vieron, sabiendo muy bien que no eran trabajadores forenses capaces de identificar signos de abuso sexual, lo que hizo que sus relatos fueran poco fiables y posteriormente falsos.
Bloguero gastronómico y director de cine israelí escribieron la historia de violación de Hamas para el NYT
Anteriormente, el diario New York Times, que promovió deliberadamente las falsas afirmaciones de que Hamas abusó sexualmente de los colonos israelíes el 7 de octubre, fue desacreditado varias veces mediante un análisis extenso de los antecedentes de los autores de su infame artículo acusando a la resistencia de tales actos.
Además de confiar la tarea de liderar la información falsa más incriminatoria a autores no calificados, un director de cine israelí y un recién graduado, los editores internos revelaron que la historia había sido apresurada y no había sido investigada ni analizada a fondo.
También, la familia de una figura clave en la historia del NYT afirmó que los periodistas manipularon sus declaraciones, informó Press TV, citando a medios israelíes.
Un día después de la publicación del informe, el sitio de noticias israelí Ynet entrevistó a los padres de Gal quienes destacaron la ausencia de pruebas que respaldaran la afirmación de que fue violada y afirmaron que los periodistas del periódico los habían entrevistado con falsos pretextos.
Los padres declararon que desconocían el tema de la agresión sexual hasta que se publicó el artículo en el American Daily. Además, las hermanas de Gal negaron con vehemencia las acusaciones de violación.
El periódico israelí Haaretz informó que la policía está encontrando enormes dificultades para localizar y encontrar colonos israelíes que fueron víctimas de agresiones sexuales o testigos de tales actos presuntamente cometidos por el movimiento de resistencia Hamas durante su Operación Diluvio de Al-Aqsa del 7 de octubre.