Editores de Wikipedia desconfían de la Liga Antidifamación
La principal autoridad estadounidense en materia de antisemitismo, ahora es considerada una fuente de propaganda o información engañosa, según la enciclopedia electrónica.
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Editores de Wikipedia desconfían de la Liga Antidifamación.
Una abrumadora mayoría de editores de Wikipedia votaron a favor de considerar a la Liga Antidifamación (Anti-Defamation League o ADL en inglés) poco confiable con respecto a la guerra en Gaza, y por tanto, agregarla a la lista de fuentes prohibidas o parcialmente prohibidas.
A la luz de esta decisión, uno de los grupos más destacados y antiguos en los Estados Unidos de defensa de los judíos, históricamente visto como la principal autoridad estadounidense en materia de antisemitismo, ahora es considerado una fuente de propaganda o información engañosa, según la enciclopedia electrónica.
Docenas de editores participantes en el debate tampoco creen adecuado citar a ADL como fuente de información factual sobre el antisemitismo, porque es una organización proisraelí y tiende a categorizar cualquier proyecto crítico para "Israel" como antisemita.
“Parece que la Liga Antidifamación ya no se adhiere a una definición seria, convencional e intelectualmente convincente de antisemitismo, sino que se ha rendido a la descarada politización del tema, que originalmente se consideraba autoritativo”, valoró un editor.
Al respecto, el profesor de historia judía en la Universidad Johns Hopkins, James Loeffler, advirtió que la capacidad de la Liga Antidifamación para cumplir su misión está directamente relacionada con su credibilidad, y esta sufrió un gran golpe como resultado de la decisión de Wikipedia.
De hecho, los editores voluntarios de Wikipedia llevan años discutiendo la credibilidad de la Liga Antidifamación, y la asociación ha sido objeto de críticas fuera de la plataforma, tanto de la izquierda como de la derecha.
Las preocupaciones se fusionaron en una nueva discusión en abril sobre la prohibición del grupo como fuente, a la cual siguieron meses de debate, incluidos cientos de comentarios de docenas de editores.
Quienes apoyaron la prohibición se centraron en el comportamiento de la Liga tras el 7 de octubre, la guerra en Gaza y la ola de manifestaciones en los campus universitarios pro-palestinas y de denuncia a "Israel".
