Irán rechazó calificación de Cuba como país asociado al terrorismo
La decisión de Estados Unidos de mantener a la isla caribeña en la espuria lista de naciones patrocinadoras del terrorismo viola los principios del derecho internacional y responde a intereses políticos coercitivos.
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Portavoz de la Cancillería iraní, Naser Kanani.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Naser Kaanani, condenó este domingo la medida del Congreso de Estados Unidos de mantener al Cuba en su Lista de países patrocinadores del terrorismo, por considerarla una designación unilateral y políticamente motivada.
Mediante un comunicado, el vocero de la diplomacia iraní consideró esa maniobra una flagrante violación de los principios del Derecho internacional y de la Carta de Naciones Unidas, entre ellos el de igualdad soberana, la inmunidad estatal y la no interferencia en los asuntos internos de otros países.
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También denunció otras medidas unilaterales de Washington por contradecir las normas internacionales reconocidas, cuya repetición socava las bases de la paz y la seguridad regionales e internacionales, y responden a enfoques políticos egoístas y de coerción.
Irán reiteró su solidaridad con Cuba, y señaló que la República Islámica, como un país víctima de esta política tan equivocada de la Casa Blanca (también está incluido en la espuria lista), apoyará con firmeza los esfuerzos del Gobierno cubano para contrarrestar esta medida ilegal de Estados Unidos y hacerle rendir cuentas.
Por su parte, La Habana denunció el uso arbitrario del término terrorismo en la política internacional norteamericana como un arma contra la nación insular.
La entrada de Cuba en el listado manipulador, en enero de 2021, fue una de las últimas decisiones que tomó la administración de Donald Trump (2017-2021), antes de dejar el poder.
Sin embargo, tras la llegada del presidente Joe Biden a la Casa Blanca ese año mantuvo tal decisión, a pesar de los reclamos del gobierno cubano por considerar la medida injustificada y tiene serias implicaciones para las finanzas de la isla, ya que dificulta las transacciones internacionales.
