Colonos de “Israel” temen desintegración de comunidades en el norte
La ola de descontento aumenta entre los colonos del norte de la Palestina ocupada, donde apenas pasa un día sin manifestaciones contra el primer ministro del gobierno de “Israel”, Benjamín Netanyahu.
La ola de descontento aumenta entre los colonos del norte de la Palestina ocupada, en la frontera con el Líbano, donde apenas pasa un día sin manifestaciones contra el primer ministro del gobierno de “Israel”, Benjamín Netanyahu, y su ejército, incapaz de asegurar la región y garantizar su regreso a los asentamientos.
El Canal 13 israelí recordó cómo al inicio de la guerra el gobierno israelí decidió evacuar todos los pueblos del norte dentro de los cuatro kilómetros circundantes a la frontera, y trasladar a esos ciudadanos a zonas supuestamente no expuestas al peligro de los misiles.
Sin embargo, eso dejó a bastantes asentamientos sin evacuar de manera formal, los cuales siguen bajo el fuego de la Resistencia libanesa (Hizbullah), y sus colonos no tienen idea de cómo será la situación para ellos la próxima semana, mes o año.
El corresponsal de asuntos militares de ese medio consideró como titular más revelador del día la advertencia sobre la imposibilidad de comenzar un nuevo curso escolar el 1 de septiembre en las ciudades de la línea del frente norte.
De acuerdo con el Canal 13, ese anuncio es una clara señal de la intención de prolongar el desgaste entre el ejército israelí y Hizbullah hasta el próximo año académico, y deja a los colonos preguntándose dónde aprenderán sus hijos, y cuándo volverán sus vidas a la normalidad.
En ese escenario, apuntó, el mayor temor de los colonos es la desintegración de sus comunidades en el norte y su traslado a otros lugares, pues según los más preocupados, tales asentamientos fueron establecidos incluso antes de formalizar el estado de “Israel".
De acuerdo con el sitio web Yedioth Ahronoth, más del 30 por ciento de los colonos evacuados durante estos meses de guerra en la Franja de Gaza y escalada de represalias de Hizbullah, decidieron no regresar a sus asentamientos.
La publicación mostró una infografía titulada “Bajo fuego”, para explicar la situación a lo largo de la frontera palestino-libanesa, donde decenas de miles de colonos fueron evacuados de 43 asentamientos, y ya mil 536 edificios, automóviles y diversas infraestructuras resultaron dañadas por los bombardeos.
Además, seis zonas industriales fueron inhabilitadas y cientos de negocios cerrados ante los ataques desde territorio libanés.
Por otro lado, el periódico Maariv cuestionó el nivel de preparación del ejército en la región, cada día menos a la altura de la Resistencia libanesa.
También responsabilizó a los dirigentes israelíes de lo ocurrido allí en estos meses y del abandono de cientos de miles de colonos, y reiteró el caráctier político, no militar, que debe primar en la decisión sobre el futuro de la guerra con Hizbullah.
Mientras tanto, Hizbullah publicó este miércoles un video excepcional bajo el título Lo que trajo de vuelta la Abubilla, con escenas calificadas como “muy inquietantes” por los medios israelíes porque se trata de la única base aérea israelí en el área, a 46 kilómetros de la frontera, conocida como Ramat David.
“¿Cómo no fue interceptado este dron durante su vuelo? ¿Cuál es el pretexto esta vez?”, cuestionó la prensa en la entidad.
Ante esa demostración de control, los medios declararon a Hizbullah como ganador en términos de guerra psicológica, además de ser una amenaza contra la Fuerza Aérea israelí, pues lee sus instalaciones “como un libro abierto".
La Abubilla logró penetrar por tercera vez los sistemas de vigilancia e interceptación israelíes, y sus videos mostraron todas las instalaciones de la base aérea.